Roberto Soriano recaló el pasado verano en el Villarreal con la vitola de ser el fichaje más caro en la historia del club, lo que disparó las expectativas en torno al centrocampista italo-alemán, que pese a una adaptación complicada —ya no solo a una nueva competición, sino también a un nuevo estilo y posición— se ha convertido en el segundo máximo goleador del equipo en la Liga, solo por detrás de los cinco goles que suma Nicola Sansone.

El ex de la Sampdoria poco a poco va siendo ese jugador con buena llegada desde la segunda línea que le reclama Escribá. «Me dice que busque la acción personal, el gol o la asistencia», apunta Soriano, que firmó ante el Atlético una de sus mejores actuaciones en España, un nivel que quiere mantener, pero que «no se siempre se puede dar». De momento, Soriano ya lleva la mitad de los goles que marcó la pasada temporada con la Samp, aunque el internacional azzurro admite que, a nivel personal, «no es algo importante». «Da igual quien marque. Lo que quiero es que el Villarreal gane y esté arriba», admite el centrocampista, que considera que el partido ante el Atlético debe ser el impulso definitivo para «recuperar» el nivel que tenían «en el inicio de la Liga. «Ante el Steaua y el Atlético el equipo ya salió más metido. Ahora nos quedan dos partidos que tenemos que ganar para pasar una Navidad tranquila».

RIVAL EUROPEO / Por último, Soriano se refirió al cruce con la Roma en dieciseisavos de Europa League, «una eliminatoria difícil» ante un rival «más completo que el año pasado». «Seguro que al 100% podemos pasar», augura.