Sara Sorribes tuvo su momento de gloria en la eliminatoria entre España e Italia, que permitió al equipo que capitanea Conchita Martínez regresar al Grupo Mundial de la Fed Cup. La valldeuxense sumó para la Roja el último punto, que supuso el 4-0, aunque apenas pudo disfrutar unos minutos sobre la pista. Junto a Anabel Medina, Sorribes saltó a la pista del Club Tennis Lleida para afrontar el choque de dobles, con todo decidido, pero Francesca Schiavone sintió muy pronto molestias físicas y tuvo que abandonar con solo dos juegos disputados (1-1), con lo que el punto era para España.

La valldeuxense había salido a disfrutar, pero apenas pudo hacerlo por el escaso tiempo que duró el choque, con el que se dio por cerrada la eliminatoria después de que tras ponerse España 3-0 y sentenciar la eliminatoria se decidiese que el enfrentamiento entre Carla Suárez y Francesca Schiavone no se disputará.

En su segunda presencia con el equipo de la Fed Cup, Sorribes volvió a conseguir una victoria. Y aunque no fue tan decisiva como la que logró hace un año en Buenos Aires ante Argentina --venció a Paula Ormaechea por 6-4 y 7-6(2), dando el primer punto a España en los individuales--, esta vez el éxito ha sido mayor, puesto que la Roja está dos años después otra vez entre las mejores.

muguruza sentencia // Pero antes de que Sorribes saliera a disputar su intrascendente partido --en lo que se refiere al global de la eliminatoria--, Garbiñe Muguruza debía rubricar el excelente resultado con el que afrontaba España el último día de competición, tras las victorias de la propia Muguruza y de Carla Suárez en los individuales del sábado, que pusieron el 2-0.

Y con esta mentalidad salió a la pista la hispano-venezolana, que superó a Roberta Vinci por un doble 6-2 y logró el 3-0, que dejaba sentenciada la eliminatoria. Muguruza, cuatro del ránking WTA, necesitó solo 59 minutos para apuntillar su victoria ante Vinci, octava del mundo, con una gran demostración de superioridad, como lo ha sido la eliminatoria en general, cerrando el encuentro con tres saques directos en el último juego del duelo.

En total España solo ha necesitado tres horas y 47 minutos para resolver el escollo que representaba Italia, que partía con tres jugadoras de alto nivel: Vinci, Sara Errani, aunque tuvo que ser sustituida por lesión por Schiavone.

Españolas e italianas se habían enfrentado en seis ocasiones, con un reparto de tres victorias para cada lado. El último choque ya había caído del lado de las españolas en el 2008.

Y con el conseguido ayer en Lleida, después de dos años de espera, el conjunto español quedará incluido ahora entre los ocho que competirán el próximo año en el Grupo Mundial. Ya todo está olvidado de aquel descenso que cosecharon en Barcelona ante Polonia, por lo que ahora España está centrada en el sorteo, que tendrá lugar el próximo 20 de junio en Zagreb y en el que conocerá a su rival para el 2017. H