La nueva Copa del Rey es un terreno abonado para las emboscadas. Aunque solo dos equipos de Primera División (Getafe y Alavés) han caído presas de estas celadas, otros muchos se han visto en serios apuros, como el Levante, Valladolid... o el propio Villarreal. Afortunadamente, el renacido Gerard Moreno, que de amarillo no celebraba un gol desde hacía casi dos meses y medio, sirvió para evitar el mal trago y darle otro sorbo a la competición.

Gerard empezó la temporada como un auténtico tiro. Aguantó el tirón del madridista Karim Benzema o del bético Loren Muñoz, llegando a encabezar en solitario la tabla de máximos realizadores. Llegó esa 11ª jornada (31 de octubre), en la que colocaba momentáneamente el 1-1 en Ipurua (aunque el Eibar acabó imponiéndose en el descuento), para colocarse con ocho tantos... y desde entonces, ni un solo más con la camiseta del Villarreal.

Porque, precisamente, ese destacadísimo inicio del ejercicio le devolvió a la selección española, prolongando ese dulce momento con la Roja, con tres tantos en pocos días: uno a Malta (15 de noviembre) y dos a Rumanía (18 de noviembre). Y ahí se paró.

Y, AL FIN, MARCÓ // Porque Gerard había detenido su cuenta en ese momento. Hasta el pasado sábado, cuando Javi Calleja le dio entrada tras el descanso (habría que ver que habría pasado, si el marcador, al intermedio, no hubiese sido el inicial). Primero, un gol de pícaro, de hombre de área, para romper el 0-0. Y luego, cuando, los lanzamientos desde los once metros ya se asomaban en Los Arcos, encontrar esa dosis de fortuna de la que ha adolecido en las últimas semanas para, tras un rebote, superar a Aitor Arias, el portero del Orihuela convertido en una auténtica muralla.

«El partido se nos complicó. Competimos, pero ellos también: sufrimos, pero al final pasamos», condensaba el barcelonés el resumen del duelo en Orihuela. «Siempre que mis goles sirvan para ayudar al equipo, yo estoy contento por marcar», aseveró tras su doblete. «Intento dar lo que me pide el entrenador; y con ellos [sus dos goles] pasamos la eliminatoria, que es lo que más felicidad me da», manifestó.

OPOSICIÓN GLOBAL // Gerard no solo destacó a Aitor Arias: «Su portero ha parado bien, pero también han hecho un gran partido». «Ellos están hipermotivados, con su gente, por lo que, a veces, estos partidos cuestan; por eso nosotros tenemos que estar al 100% siempre», corroboró. «Si no lo estamos, nos costará», advirtió.

El atacante barcelonés ponía el foco en el Espanyol. «Será un encuentro muy complicado. Vienen con un nuevo entrenador y tras hacer un buen partido contra el Barça, aunque nosotros queremos mantener la buena dinámica que estamos teniendo en las últimas semanas», contempló.

Aunque en la prórroga y ante un rival dos categorías por debajo, el Submarino ya suma cinco victorias consecutivas: «Cuando el equipo está con buenas sensaciones, hay que aprovecharlo al máximo». «Estamos en buena dinámica y creo que si seguimos así, podemos ganar a cualquier equipo», agregó, seguramente teniendo en cuenta, más que el triunfo en Los Arcos, los ligueros en el Pizjuán o Anoeta, por ejemplo. «Si queremos estar arriba, tenemos que ganar y no bajar la guardia», apostilló el 7.

OTRA VEZ EL ARBITRAJE // No gustó nada el andaluz Melero López en Los Arcos. Gerard se sumó a las reclamaciones de los amarillos respecto a los goles anulados y al «claro penalti» no señalado sobre Santi Cazorla. «Al final los árbitros también se pueden equivocar, pero hemos de mirarnos a nosotros mismos: tuvimos muchas ocasiones y sufrimos demasiado», resumió el delantero de Santa Perpètua de Mogoda.