Cuidando su alimentación hasta el más mínimo detalle, levantándose a las cinco de la mañana para irse a entrenar, convirtiendo días festivos en un lunes más de entrenamiento… Así es como Lidón Muñoz del Campo está sacrificándose para luchar por un sueño: la participación en los Juegos Olímpicos de Tokio del 2020.

Para ello, la castellonense necesita conseguir la mínima en una de las tres citas clasificatorias. La primera de ellas será la Swim Series FINA 2019, que se disputará desde este viernes 13 de diciembre hasta el domingo 15 en Amsterdam (Holanda) y donde Lidón competirá en sus tres grandes especialidades (50 y 100 libres, y 50 mariposa).

«El miércoles me voy a Amsterdam para buscar la mínima de Tokio. El inicio de temporada que he tenido me ha dado mucha confianza y no pienso en otra cosa que no sea lograr el objetivo. Soy consciente deque no será fácil, pero me encuentro en un gran estado físico y mental, y creo que ha llegado mi momento», asegura Lidón Muñoz en conversación con Mediterráneo.

Repóquer en el Nacional

La atleta del Club Natació Sant Andreu llega a la prueba tras arrasar en el Campeonato de España de piscina corta disputado Gijón hace apenas un mes, donde fue la gran estrella al batir hasta cinco récords de España: 100 estilos (1.00.68), 4x50 libres (1.39.90), 100 libres (52.61) y 50 mariposa (26.42). «Durante el Nacional iba consiguiendo récords y no quería pensar en ello. Soy muy metódica y me gusta analizar las cosas con calma, cuando ganaba un oro solo pensaba en el siguiente. Pero es verdad que al acabar el torneo me di cuenta que había conseguido algo irrepetible», asegura la deportista provincial.

En Holanda buscará la mínima olímpica en sus dos especialidades, los 50 y 100 libres. «Voy a centrarme en las dos modalidades en las que más opciones tengo para luchar de verdad por la mínima. Nadaré también en 50 mariposa aunque será más difícil. En 50 libres tengo que hacer 24,77 y en 100 libres 54,38. Es una marca que ya rocé en Roma y creo que puedo conseguirlo».

No obstante, si no adquiere el billete en Amsterdam, todavía podría hacerlo en el Nacional de abril o en el Europeo de mayo: «El objetivo es conseguirlo y preparar el 2020 con la confianza que te da una presencia en los Juegos, pero también tengo ese colchón que te da poder lograrlo en las otras pruebas».

La castellonense, que recientemente ha cumplido 24 años, es la gran sensación de la natación española y atraviesa su mejor momento desde que es profesional. «He tenido que esperar hasta los 24 para estar en mi mejor momento. A los que no nos salen las cosas fáciles como a mí, es un proceso de maduración que hay que pasar y lo estoy pasando», detalla la Sirena de la Plana.

Asimismo, Lidón valora lo que sería competir en la capital nipona el próximo verano: «Llevo muchos años en la élite sin obtener resultados. Estaba muy lejos pero ahora, con la progresión que he tenido, creo que estoy en el sitio donde tengo que estar y me siento cerca. Si lo lograse, en ese momento, tendría sentido todo lo que he sacrificado durante mi carrera y los momentos malos por los que he pasado. Ojalá pueda vivir unos Juegos Olímpicos».

Pese a que el mero hecho de estar en la competición olímpica ya sería cumplir un sueño, la ambición de la castellonense va mucho más allá. «Mi objetivo es lograr la mínima para poder competir, no quiero ir a Tokio de vacaciones. Si me clasifico, me veo en condiciones de pelear por unas semifinales, algo que sería inimaginable hace tan solo unos años», concluye una Lidón que está a punto de recoger los frutos a una prolífica carrera en la piscina.