El Tribunal Supremo confirmó la condena de 21 meses y la multa de 2.093.000 euros impuesta a Leo Messi por tres delitos fiscales. En cambio, ha rebajado a 15 meses la de su padre, Jorge Horacio Messi, al aplicarle la atenuante de reparación del daño, que la Audiencia de Barcelona ya había aplicado al delantero, pero no a él, por los 5.016.542 euros que devolvieron a Hacienda.

La sentencia incluye los votos de dos de los cinco magistrados que empezaron a estudiar en abril los recursos del jugador y de su padre contra la condena de 21 meses de prisión que cada uno de ellos impuso la Audiencia de Barcelona por un fraude de 4,1 millones de euros por no declarar en los ejercicios de 2007, 2008 y 2009 lo obtenido en derechos de imagen. Los magistrados Luciano Varela y Andrés Palomo consideran que el jugador debió haber sido condenado por un único delito fiscal, pero continuado, mientras que Jorge Alberto Barreiro comparte la decisión mayoritaria, pero no su argumentación.

¿A LA CÁRCEL? // Al ser la condena inferior a los dos años, Messi difícilmente tendrá que pisar la cárcel, pero existe algún precedente en el que sí ha ocurrido, como el del exministro y expresidente balear Jaume Matas, que ingresó para cumplir una condena de 9 meses. En estos casos es potestad del tribunal sentenciador, la Audiencia de Barcelona, determinar si debe ser encarcelado o no.

El Supremo sostiene que Leo conocía su obligación de tributar los ingresos obtenidos por la explotación de sus derechos de imagen. «Cualquiera que fuera su ingenuidad, las actuaciones que indican que interviene personalmente, y no solo estampando su firma en documentos, revelan su consciencia de que ese camino llevaba inexorablemente al insolidario resultado de la defraudación fiscal», dice la sentencia.

TRAMA // La Audiencia declaró probado que Messi omitió declarar sus ingresos por derechos de imagen, mediante una trama, iniciada en 2005, consistente en crear la apariencia de que los cedía a sociedades radicadas en Belice y Uruguay. Después se formalizaron contratos entre esas sociedades y otras, en Suiza y Reino Unido que tenían suscritos convenios de doble imposición.