El Villarreal-Atlético de Madrid se podía haber disputado en Miami. El público estadounidense se perdió un partido espectacular, pese al 0-0. Se dice, a la hora de explicar el motivo por el que el fútbol (soccer para los yanquis) no termina de ser un deporte de masas, es porque no entienden que un partido pueda quedar en empate, ni que registre el mismo marcador que el inicial, dos circunstancias que se dieron la mano el viernes por la noche en el Estadio de la Cerámica. Pero, desde luego, ninguno de los 17.964 espectadores que lo vieron en vivo y en directo, más los millones que lo presenciaron por televisión, pudieron afirmar que se aburrió. Este encuentro pasa por ser el que más remates ha registrado en este 2019: 23 los amarillos, 18 los rojiblancos.

Los partidos duran 90 minutos, pero de tiempo efectivo son muchos menos. No hay datos concretos de cuánto tiempo estuvo el balón en juego en el Villarreal-Atlético, disputado a tumba abierta, pero según un estudio del CIES Football Observatory con datos de InStat, publicado hace un mes, cifra en un 53,3% el tiempo que se juega realmente en cada partido en LaLiga (un índice bajo, en comparación con otros torneos europeos). Es decir, sobre los 48 minutos. Teniendo en cuenta que el Submarino remató en hasta 23 ocasiones contra la portería defendida por Jan Oblak, sale a una media cercana a un disparo por cada dos minutos de tiempo efectivo. Una barbaridad, ya que estamos hablando de un partido entre dos equipos de la élite.

Según la estadística publicada a través de los canales oficiales de LaLiga, los futbolistas amarillos dirigieron, entre los tres palos, 13 de esos 23 remates, obligando al cancerbero esloveno a hacer tres intervenciones.

RÉCORD EN EL PRIMER ACTO

Con todo, ese tiroteo sin recompensa (bueno, el punto es un escaso botín para tamaño despliegue de recursos ofensivos) deja una plusmarca en la Primera División del fútbol español en los últimos cinco lustros. Los 16 remates del Submarino en el primer tiempo es la mayor cifra, en cualquier primer periodo, desde la temporada 2003/2004. Repito: 16 tiros a puerta en lo que pudieron ser en alrededor de 25 minutos de juego efectivo (minuto arriba, minuto abajo). En la segunda parte, el Atlético se acercó a los datos del Submarino, pero por debajo.

Después de promediar casi 2,5 goles por partido en las 10 primeras jornadas, la sequía en las seis más recientes (solo cuatro) es uno de los factores determinantes de que los amarillos solamente hayan sumado dos puntos de los últimos 18 en juego.

NO VEN PORTERÍA

Gerard Moreno, que arrancó como máximo realizador en solitario, solamente ha marcado en este tamo en Ipurua, por lo que suma cinco jornadas a cero. Los otros tantos son los de Santi Cazorla de penalti en Mallorca, el de Samu Chukwueze frente al Celta y el de André-Frank Zambo Anguissa en Mestalla. Ni rastro, por ejemplo, de Karl Toko Ekambi (ha perdido, incluso, la titularidad), Carlos Bacca (en su descargo, decir que no llega a los 250 minutos hasta el momento), Moi Gómez...

Esa carestía ha provocado que el Submarino, que estuvo llamando durante varias jornadas a las puertas de Europa (zona que no pisa desde la conclusión de la temporada 2017/2018), pueda quedarse esta tarde a ocho puntos, si bien la distancia respecto al descenso continúa siendo bastante tranquilizadora...