Juan Carlos Unzué, entrenador del Celta, alertó ayer de la peligrosidad del Villarreal en un partido en el que auguró una «bonita batalla» por tener el control del juego, a pesar de que ambos llegan con importantes bajas.

El Villarreal «ha tenido una muy buena reacción desde la llegada de Calleja, no solo en cuanto a resultados, sino también de juego. Será un partido competido y difícil ante un equipo parecido al nuestro en muchos conceptos», comentó el técnico celeste.

El navarro destacó que los amarillos tienen «distintas alternativas» y la capacidad para hacer «ataques combinativos» o apostar por dañar a su rival con «rápidas transiciones». De ahí que consideró importante adueñarse del balón y tener «mucha efectividad» cuando superen la presión visitante. «No nos va a regalar la pelota», recordó Unzué, para quien su equipo ha sido «competitivo» desde el inicio del campeonato: «No podemos quedarnos solo con los últimos partidos», matizó.

El entrenador del Celta no cree que Iago Aspas y Hugo Mallo forzaran, frente al Valencia en Mestalla, su quinta tarjeta amarilla para no perderse el derbi contra el Deportivo. Unzué evitó decir quién será el sustituto del segundo en el lateral derecho, aunque sí confirmó que el internacional turco Emre Mor es «una de las opciones» que maneja para sustituir al goleador de Moaña.