Acabaron los objetivos competitivos para el Villarreal tras certificar en Riazor la plaza directa para la fase de grupos de la Europa League y el club amarillo ya tiene vía libre para planificar el próximo proyecto, en el que además de la certeza de disputar por quinta ocasión consecutiva competición continental también deja la continuidad de Javier Calleja como máximo responsable de una primera plantilla en la que la cúpula del club quiere acertar de pleno con los retoques necesarios para seguir siendo uno de los referentes del fútbol español.

La experiencia de la temporada que concluirá el próximo sábado en La Cerámica obliga más que nunca a disparar tiros certeros en el mercado de fichajes que se abrirá oficialmente el 30 de junio. El Villarreal intentará dar en el clavo con fichajes capaces de dar rendimiento inmediato, algo que en el presente ejercicio no se ha producido en los principales desembolsos. Huelga decir nada sobre Rúben Semedo, mientras que Ünal solo empezó a dejar detalles del delantero que puede ser después de su cesión al Levante. De los fichajes del pasado verano, solo Fornals ha podido responder a las expectativas.

Para este verano, los primeros apuntes que dejan los movimientos desvelados en las últimas fechas revelan una apuesta por la experiencia en la Liga. Es, por supuesto, el caso de Gerard Moreno, el segundo mejor goleador español, y también el de Sidnei, un central con más de 150 partidos en Primera a sus espaldas.