La expulsión de Parejo al borde de la hora de partido se convirtió en la acción más polémica de un derbi que, a excepción de la roja directa para el 10 del Valencia, no dio demasiado trabajo a Jaime Latre. Incluso el entrenador del Villarreal mostraba su parecer de la rigurosidad del castigo. «Hablé con Parejo tras el partido y me dijo que no era para roja. Por mi parte, sí vi una entrada fuerte —sobre el argentino Funes Mori—, pero no mala intención», indicó Calleja.

Evidentemente en las filas valencianistas existía un poso de indignación por la jugada que les dejó en inferioridad la última media hora de encuentro. Rubén Uría, relevo de Marcelino ante los medios después de la expulsión del técnico asturiano al protestar la acción, no se mordió la lengua. «Entradas como las de Dani [Parejo] hay muchas en cada partido; sin embargo como la de Mario a Coquelin pocas», se quejó el segundo de Marcelino, que consideró que el lateral amarillo tampoco debió acabar el partido tras su acción en el minuto 89.