Uruguay sucumbió claramente en Chile (3-1) y vio cortada su racha aunque sigue conservando el segundo puesto en las eliminatorias sudamericanas. La derrota alarga su mala racha en Santiago, donde no ha vencido en los últimos 15 años, y le impidió mantener la mínima desventaja que mantenía con Brasil, que ganó en Perú y se escapa en la clasificación.

Pudo cambiar la historia si los charrúas se hubieran mostrado más consistentes. Edinson Cavani, el máximo goleador de las eliminatorias, inauguró el marcador en el primer tiempo (m. 16), pero Eduardo Vargas igualó instantes antes del descanso. El exazulgrana Alexis Sánchez continuó la remontada (m. 60 y 76) con un par de tantos, recuperando la inspiración goleadora que le había abandonado en la selección desde octubre del año pasado.

La fiesta fue completa cuando, cerca del final, Claudio Bravo paró un penalti a Luis Suárez. El delantero azulgrana no supo batir a su excompañero y remató su mal día con una tarjeta amarilla que le impedirá jugar el próximo partido de Uruguay en el mes de marzo frente a Brasil. Tampoco participará Mosquera por el mismo motivo ni Arturo Vidal con Chile.

"Estamos muy vivos. Vamos a seguir peleando y esperamos solucionar los problemas y reiniciar en marzo la carrera hacia Rusia, que pese a la derrota nos tiene en una posición bastante buena", dijo Óscar Washington Tabárez, el técnico uruguayo.