Tanto le ha costado llegar hasta aquí (líder de la Liga con ocho puntos de renta sobre el Atlético y 15 sobre el Madrid, finalista de la Copa y ya en cuartos de final de la Champions) que Valverde no quiere estropear en dos meses el durísimo trabajo construido tras un verano volcánico. «Claro que habría firmado estar en esta situación a inicios de temporada. Lo habría firmado con sangre», dijo gráficamente el técnico azulgrana, anunciando que esta tarde ante el Athletic, que llega con cinco bajas y dolorido por la eliminación en la Europa League, «empieza la cuenta atrás».

Una «cuenta atrás» en la que el Barça lo tiene todo cerca (ni Madrid ni Atlético optan al triplete), pero también lejos. «Nos lo jugamos todo en pocos días y en tres competiciones. No hemos ganado nada», afirmó el técnico.

VERMAELEN, BAJA / Igual de prudente estuvo cuando le preguntaron por el Roma, el rival que le espera en los cuartos de final de la Champions. «Es complicadísimo, le ganó 3-0 al Chelsea y quedó primero en un grupo con Chelsea y Atlético. Y eso de que es el mejor equipo que nos podía tocar yo no me lo creo. Ni se lo cree nadie. Vamos con mucho reparo», reconoció el técnico del Barça, quien considera «fundamental ganar al Athletic» para empezar bien la decisiva «cuenta atrás».

Hoy, sin embargo, el Barça tiene muchas bajas. Vermaelen, que sufrió una contusión en el tobillo izquierdo («nos asustamos mucho cuando le pasó el jueves en el entrenamiento», confesó el técnico), se une a la ausencia de Busquets, Semedo y Denis. A todos ellos confía Valverde en recuperar tras el parón. Además, Suárez tampoco estará ante el Athletic tras ver la quinta amarilla que vio en Málaga, mientras Valverde repite su frase de cabecera. «No hemos ganado nada».