Con estricta puntualidad y con la exposición bien preparada, Velasco Carvallo, presidente del Comité Técnico de Árbitros, expuso un análisis tan amplio como benevolente de la actuación arbitral en la primera mitad de la temporada. Según la dirección de los árbitros españoles, la actuación es difícilmente mejorable, con porcentajes de acierto cercano al pleno. Los árbitros cometemos errores y el Var no es perfecto, dijo Velasco en un momento dado, en un golpe de realidad para los que, inmiscuidos en la nube de explicaciones, podíamos haber llegado a pensar que la perfección está al alcance de la mano.

En medio de la exaltación de su propia labor en la Supercopa, entre otras cosas por haber implementado en la transmisión televisiva información básica sobre qué comprueba el VAR, algo que parecía natural desde el inicio. También por la justicia, dijo, que se impartió en la semifinal Barça-Atlético de la Supercopa. Sin VAR, el clasificado hubiera sido otro. Señalamos un fuera de juego que era milimétrico, dijo Velasco en la afirmación con más certezas del medio día en Las Rozas.

LÍNEAS SUPERPUESTAS

Siempre con la intención de evitar comentar jugadas concretas, el gol anulado por fuera de Vidal en la Supercopa sobrevoló la sala de conferencias en las cuestiones sobre esas acciones milimétricas: Cuando un segundo adelante o uno atrás en la imagen cambia las líneas, cuando están casi superpuestas, nuestra orden es no intervenir, explicó Velasco. Aunque parezcan milimétricos, los fueras de juego corregidos eran con una imagen clara y manifiesta, sin dudas, ratificó a continuación.

Entre las innumerables polémicas surgidas tras actuaciones del videoarbitraje, que Velasco despachó con un argumento clásico: Es anecdótico cuando alguien sale a decir que hemos acertado, que exime al colectivo de ninguno de sus errores.

SATISFACCIÓN GENERALIZADA

En el análisis de la actuación en La Liga, nada cambia para el Comité Técnico de Árbitros: satisfacción y en camino al error cero, sin más crítica que el "no haber enseñado apropiadamente el criterio que siguen con las manos", dijo Clos Gómez, en una actuación memorable según sus propios criterios.

Las cifras que presentan siguen siendo realmente increíbles: El Comité reconoce siete fallos en 425 jugadas de penalti en Primera División, en las que el VAR debió haber intervenido, o bien intervino sin que la jugada lo mereciera. Al final, los números arrojan más de un 98 por ciento de acierto en penaltis y casi un 96 por ciento en fueras de juego que chirría ante cualquiera que siga el campeonato con asiduidad.