Santi Cañizares y su copiloto Ricardo Ranero (Porsche 911 GT3) fueron los inesperados ganadores del Rally de la Cerámica, cuya 28ª edición se disputó ayer en las carreteras castellonenses.

El exportero de la selección española de fútbol se alzó con la victoria final después de que Santi Carnicer (Ford Fiesta R5), auténtico dominador de la carrera tras haber marcado el mejor crono en los ocho tramos cronometrados disputados en esta edición, sufriera una rotura del alternador en su coche en el enlace de vuelta a Castellón.

Aunque el piloto alcorino pudo reparar la avería y cruzar la meta dentro del máximo tiempo permitido por la organización, los comisarios deportivos entendieron que había recibido ayuda externa, por lo que fue finalmente excluido de la clasificación.

Cañizares se encontró de esta forma con un triunfo inesperado, que se suma al que también consiguió en tierras castellonenses en el Rally Costa Azahar Classic del 2013, después de haber logrado completar un rally sin errores y aventajar al piloto cántabro Javier Polidura (Ford Fiesta R5), que finalmente terminó segundo. El castellonense Óscar Donet (Renault Clio RS) completó el podio final de la prueba, tras la exclusión de Carnicer.

El rally estuvo marcado en esta ocasión por las elevadas temperaturas que se registraron durante toda la jornada, que pusieron a prueba tanto a máquinas como a participantes y que incluso llegaron a provocar algunos abandonos por deshidratación.