Dani Alves encendió ayer no solo las redes sociales sino al barcelonismo con su aparición en Instagram pretendiendo ser su novia, Joana Sanz, e impostando la voz. Disfrazado con una peluca, parecía ridiculizar la eliminación azulgrana en la Champions contra el Atlético de Madrid. El presidente del Barça, Josep Maria Bartomeu, salió en su defensa. Muchos otros seguidores, en cambio, expresaron su contrariedad por las redes sociales.

“¡Hola! Soy Joana Sanz. Quiero mandar mucho ánimo a mi cariño que está muy triste. Pero, cariño, es solo un partido de fútbol. No pasa nada, la vida sigue. Tú vales mucho más que esto, ¿vale? Te amo mucho. Te quiero mi amor ¡Te quiero!”, dice el defensa.

Las críticas le llovieron de todas partes. Por, aparentemente, banalizar la derrota, faltar al respeto a los aficionados más compungidos y por el contrates con las lágrimas vistas el día antes a Iniesta. Bartomeu trató de desdramatizar la situación: “Hay varias formas de mirarlo. Una de ellas es que seguramente los jugadores ya han superado el trago del miércoles y volvemos a ser positivos. Pero hay socios que se han sentido ofendidos porque están sufriendo”.

FILOSOFÍA DE VIDA // Joana Sanz ha salido en defensa de su novio. Utilizando también Instagram, la joven modelo tinerfeña se ha despachado a gusto contra los críticos. “Si todo el mundo tuviera tu filosofía de vida, serían más felices. En las derrotas no se acaba el mundo, señores...”. H