El Racing de Onda decidió el pasado verano realizar un cambio notable en su imagen vistual, una mutación que ha implicado la modificación de su denominación, escudo y también los colores de su uniforme, que este año pasan a ser blanco en su camiseta y negro en el pantalón. El nuevo Vila d’Onda nace de la motivación del club de establecer un punto de inflexión y romper con el pasado.

Este nuevo contexto incluye una redefinición de los objetivo de la entidad. El punto principal radica en el primer equipo, en el que la nueva meta marcada es la del ascenso a Regional Preferente, fita que sería histórica para un club que apenas cuenta con tres temporadas en Primera Regional, la segunda consecutiva.

La dirección deportiva ha centrado su estrategia en recuperar a jugadores del municipio de Onda que estaban compitiendo en otros equipos de la provincia. Algunos de estos nuevos refuerzos proceden de Regional Preferente, e incluso algunos poseen experiencia en Tercera División. Entre los fichajes más destacados están el meta Alberto Catalán; el zaguero Josu; los centrocampistas Iñaki Calvo, Sola, Javito, Lozar o Pedro Berrocal; así como los delanteros Miguelín o Pusi.

En el apartado económico la entidad está saneada y vive inmersa en un plan de de transparencia mediante el cual el club quiere publicar el origen del dinero con el que se financia el nuevo Vila d’Onda. La entidad se prepara para el año más ilusionante con un proyecto serio y con gente del municipio.