Hace un año el Racing Onda modificaba su denominación, escudo, uniforme e imagen visual general, pasando a competir bajo el nombre de Vila d’Onda. Estos importantes cambios llevaban de la mano un nuevo proyecto deportivo ilusionante, en el que se atisbaba el objetivo de ascender a Preferente. Doce meses después, el conjunto ondense ha alcanzado la categoría reina del fútbol provincial y lo ha hecho a base de resultados y buen juego.

El conjunto dirigido por Iván Arroyo ha cuajado una campaña redonda, en la que se ha proclamado campeón con diez puntos de ventaja sobre el segundo clasificado, La Pobla, siendo el máximo goleador del grupo y el equipo menos goleado. Y todo tras ceder solo tres derrotas en 24 partidos.

Los de la Plana Baixa todavía no habían certificado el ascenso en el campo, pero cuando se paró la competición por el coronavirus, con seis jornadas por disputar, tenían todas las papeletas para conseguirlo de sobra.

Con todo, la decisión de la FFCV de dar luz verde a los ascensos de los campeones y subcampeones de cada liga ha reconocido el trabajo de todo un año de la entidad que preside David Palacios. La política de contar con jugadores de la población para sentar las bases del crecimiento del club está dando sus frutos y ello se ha visto cristalizado con el ascenso del primer equipo a Regional Preferente, una meta que hace un par de años, cuando el equipo competía en Segunda Regional, era prácticamente impensable.

El gran mérito de esta hazaña se lo llevan los jugadores, una plantilla de gran potencial, formada por futbolistas de notable calidad y/o dilatada experiencia.