Fernando Roig se propuso hace unos años que la Ciudad Deportiva Pamesa, la segunda propiedad del club que preside en Vila-real, fuera conocida en toda España acogiendo el torneo que todos los años reúne a los mejores jugadores alevines del país. El presidente del Villarreal abrió la puerta de las instalaciones a LaLiga y a la Fundación José Ramón de la Morena, organizadores del evento, y tal fue el grado de satisfacción que la próxima semana Vila-real acogerá por quinta vez consecutiva la competición.

La Ciudad Deportiva Pamesa ha cogido el testigo de Brunete, la localidad madrileña que inició este ya clásico torneo de cierre de temporada —lo acogió de 1992 al 2009— y que entre los alevines de los 20 clubs de Primera División ha alcanzado la categoría de algo así como un campeonato de España oficioso. Durante tres días, desde el viernes 14 al domingo 16 de junio, el futuro del fútbol español se reunirá en Vila-real. El Submarino, el equipo anfitrión, buscará su tercer título. El primero llegó en el 2007, todavía bajo la denominación de Torneo Brunete. Ya en las instalaciones del Villarreal —utilizadas habitualmente por el Roda—, los alevines groguets levantaron el trofeo en el 2016, con un orgulloso Roig encargado de entregar la preciada Copa a los chavales.

Los amarillos comenzarán la primera fase —se disputará por completo el próximo viernes— encuadrados en el grupo B, junto al Rayo Vallecano, el Celta, el Sevilla y el Eibar. La jornada del sábado 15 se dedicará a los octavos y a los cuartos de final, que se repartirán entre las sesiones matinal y vespertina, respectivamente. Para el domingo 16 quedarán reservadas las semifinales y la finalísima de una LaLiga Promises que ha echado raíces en Vila-real, por derecho propio la capital del fútbol base nacional.