El Villarreal está dando prioridad en los últimos días a la operación salida por delante del objetivo de acabar de perfilar la entrada de nuevos efectivos en la plantilla que tendrá Javier Calleja para iniciar la temporada oficial 2018/2019, con algunos retoques todavía pendientes que pueden afectar al centro del campo y al ataque del Submarino.

De momento, la entidad amarilla está centrada en soltar el máximo de lastre posible en cuestión de fichas, con el fin de no complicar el estricto cumplimiento del fair play marcado por la Liga en cuestión de sueldos y que, en el caso del Villarreal, estará entre los 80 y 90 millones de euros. La pasada campaña ese tope salarial impuesto por el organismo que rige el fútbol profesional español quedó establecido en 87 millones de euros.

El conjunto amarillo inició la presente semana con una nómina que sobrepasaba la treintena de futbolistas en el grupo que está llevando a cabo la pretemporada. De momento, la única salida confirmada oficialmente ha sido la del central Pau Francisco Torres, que ya es miembro de facto del Málaga que intentará retornar a Primera División la próxima temporada. En las próximas horas la actividad en los despachos de la Ciudad Deportiva seguirá con su actividad para seguir reduciendo el número de efectivos del primer equipo, ahora en overbooking.

Como ya apuntó en su edición de ayer Mediterráneo, Adrián Marín será otro de los futbolistas que aminoren la masa salarial del Submarino en breve. las negociaciones con el Deportivo Alavés —destino en las últimas temporadas de algunos jugadores descartados para la primera plantilla, como Alfonso Pedraza, la pasada campaña, o, con anterioridad el argentino Cristian Espinoza— van encaminmadas para que el de Torre Pacheco se incorpore en los próximos días al club vitoriano.

Antes, incluso, que la del lateral zurdo, puede quedar vista para sentencia la marcha de uno de los futbolistas con salario más elevado de los actuales jugadores con contrato en el Villarreal. Alfred N’Diaye ya ultimaba ayer en Málaga su incorporación al club de la Costa del Sol como refuerzo estrella de la entidad andaluza.

EN LA RAMPA DE SALIDA

Otros jugadores con nóminas importantes y con el cartel de transferibles están a la espera de que se concreten en ofertas lo que actualmente solo son intereses. Roberto Soriano y Sansone siguen estando en el escaparate de la Serie A italiana, donde ambos mantienen un buen cartel. En 10 días se cierra el plazo de fichajes en Italia. Además, el Villarreal está a la espera de que se clarifique la situación de Samu Castillejo —en negociaciones con el Sevilla— y de la llegada de una oferta interesante por Cheryshev, revalorizado tras el Mundial.