El Mini Submarino amarillo se impulsó hacia su objetivo de caza del play-off con una importante victoria ante un rival directo como el Cornellà. Lo hizo además de forma contundente con un 4-2 que incluyó una remontada antes del minuto diez de partido. Los goles del empate y la remontada los firmó Mario, el 3-1 fue obra de Carlos Martínez, mientras que Pau Torres, tras el 3-2 materializado por el cuadro catalán, cerró el marcador de un testarazo en el 64.

El partido comenzó de forma fulgurante, ya que cuando tan solo habían pasado dos minutos de juego el marcador ya se había estrenado. Fue el cuadro visitante el que dio el primer golpe por medio de Puerto. El ‘10’ recogió un rebote dentro del área local y fusiló al portero Cantero para poner el 0-1 en el luminoso.

Remontada // Los canteranos amarillos no perdieron la calma y siguieron, como siempre, fieles a su estilo, tocando el esférico y combinando en ataque. Así, cuando apenas habían pasado seis minutos desde el gol visitante, en el ocho, el filial amarillo conseguía el empate. Fue Mario, fusilando esta vez al portero rival desde dentro del área tras un pase de Cantalapiedra.

Conseguido el empate, y con un Mini Submarino inspirado, llegó la remontada un minuto después. Mario, de cabeza desde el segundo palo, aprovechó un saque de esquina que se paseó por el área hasta su posición.

Minutos después, el choque entró en una fase de control local del balón, en la que se llegaron a anular hasta dos goles a los amarillos por fuera de juego.

Tras la reanudación, los pupilos de Paco López se impusieron rápidamente a los de Jordi Roger, pese a que los catalanes lucharon para disputar la posesión del balón de entre las botas de los jugadores amarillos. De esta forma el Villarreal B volvió a perforar la meta verdiblanca en el minuto 53, gracias a un disparo colocado de Carlos Martínez desde dentro del área que hacía inútil la estirada del portero forastero.

Los visitantes, aunque afectados por el gol, no se amilanaron y recortaron distancias un minuto antes del 60, cuando Lulu remató de cabeza un córner servido por Abraham. Sin embargo, las aspiraciones del Cornellà fueron sesgadas rápidamente, ya que en el minuto 64 Aitor Cantalapiedra colgó un saque de falta desde la izquierda para que el central de Vila-real, Pau, rematara de cabeza al fondo de la red.

El encuentro terminó con el equipo visitante buscando un fútbol más directo que les metiera en el partido, mientras la escuadra filial tocaba con criterio y maduraba las jugadas de banda a banda buscando el mejor hueco para acercarse a portería. Ninguno de los dos equipos tuvo más suerte y el encuentro se cerró con una victoria más para los discípulos de Paco López.