En el minuto 89:34 Sergio Lozano, un chaval al que le gusta lanzar obuses cuando uno menos se lo espera, probó fortuna y su trallazo acabó por estrellarse al fondo de las mallas de la portería del Cornellà. Era el 1-2 y poco más se jugó allí, en el feudo verdiblanco. Y es que de una tacada el filial amarillo rompió con todos los gafes: ganó cuatro jornadas después, venció en un campo donde nunca lo había hecho hasta ayer y además marcó en un escenario donde jamás lo hizo antes. Tres puntos que le mantienen con ese pulso con el intratable líder Andorra.

Se hizo justicia en el último suspiro del duelo. Quizá mucho antes mereció el premio del gol. Por ejempló, el trabajador Álex Millán lo tuvo en el minuto 56 con 0-1 en el marcador, pero apareció un defensa de no se sabe dónde y sacó el balón desde la misma línea de gol. El premio le llegó al equipo a última hora con el golazo de Sergio Lozano, y bienvenido sea.

Cambios en el once / Miguel Álvarez apostó por un once con cambios obligados y otros forzados. En la portería regresó el zaragozano Diego Fuoli; Migue Leal jugó en el lateral diestro y el murciano Goyo Medina en el izquierdo. En el eje de la zaga también el central barcelonés Carlos Blanco. En la punta del ataque Edu Espiau tuvo de pareja al zaragozano Álex Millán.

Al partido no le faltó intensidad desde el pitido inicial. En el arranque, el Cornellà tuvo algo más de posesión. El Nou Estadi es un campo de unas dimensiones no muy grandes y de césped artificial. Necesitó un cuarto de hora el equipo de la Plana Baixa para empezar a tener la posesión del cuero.

En el centro del campo intentaron imponer su criterio Sergio Lozano y Ramón Bueno, ante los locales Fall e Isach Nana. Allí se buscaba la conexión con algún compañero. Por momentos parecía como si hubiese una saturación de efectivos. Y entre faltas y fueras de juego, mediado el primer tiempo, llegaron las ocasiones para ambos equipos.

El primer susto fue local. En el minuto, 19 Pablo Hernández recuperó el cuero en tres cuartos de campo. Éste cedió el balón a su compañero Isach Nana que lanzó escorado, pero allí estuvo muy atento Diego Fuoli para atajar el esférico.

El filial avisó / Luego llegaron dos avisos del Villarreal B. El primero en el minuto 23 donde la jugada llevada por Álex Millán y Migue Leal fue abortada por la defensa verdiblanca antes de que el balón fuera rematado por un visitante. Y la más clara en el 28: Falta sobre Diego Collado cerca del área del Cornellà, que sacó el central Carlos Blanco, y su trallazo se estrelló en el palo. Dos avisos antes del gol. El filial amarillo puso el 0-1 en el minuto 40. Una jugada por la izquierda llevada por Goyo acabó con un remate de Diego Collado y cuyo rechace del portero Ramón lo cazó Edu Espiau para poner a los vila-realenses con ventaja.

Con ese 0-1 se llegó en el descanso. Y en la reanudación más de lo mismo. Mucha intensidad, mucha brega y ocasiones. En el minuto 47 los jugadores del Villarreal B pidieron penalti por manos de un central local. Y poco después estuvo a punto de llegar el 0-2, pero el remate de Álex Millán a puerta vacía, lo sacó in extremis el lateral local Javi Jiménez desde la línea de gol.

Emoción hasta el final / Se llegó a la recta final con todo por decidir. Cuando apenas quedaban 26 segundos para el final llegó el golazo de Sergio Lozano para anotar el 1-2 desde unos 30 metros. No se lo pensó dos veces y batió al portero local. A partir de ahí ya no se jugó. Tampoco quedaba tiempo para mucho más.