El Villarreal C no pudo conseguir doblegar al Silla, que sacó un inmerecido empate del Mini Estadi. Los de Pere Martí dominaron con posesión todo el partido ante un Silla replegado atrás.

El comienzo del duelo no fue tan intenso como cabría esperar en el aspecto de la presión sobre la salida del balón. El cuadro local tuvo la posesión del esférico pero sin propagarse demasiado en ataque. El Silla se limitó a colocar bien sus líneas defensivas, es decir, comenzó por cimentarse bien abajo para poder construir algo arriba.

Los locales se avanzaron en un centro de Narro en una falta lateral que Pereiro se encargó de cabecear al fondo de la portería visitante. Pero solo ocho minutos después, en el 27, un contraataque visitante llevó la igualada al marcador. Verdú se presentó en la frontal por el carril del 8 para cruzar un pase al lado opuesto del área, donde Gabri controló y disparo cruzado ante la salida del cancerbero amarillo.

Tras la reanudación, los locales fueron a por el partido, ya que a los cinco minutos de la segunda mitad Narro dispuso de la primera ocasión clara con un tiro cruzado que salió lamiendo el poste. En el minuto 53, un rápido contraataque groguet terminó en un pase en profundidad de Yeremy a Ahn, que finalizó la jugada con un disparo cruzado que superó al portero rival. Parecía que la tranquilidad había llegado para en el Villarreal C, pero el duelo se fue calentando por momentos.

Así las cosas, el árbitro no supo calmar la situación con decisiones controvertidas. Una de ellas fue pitar penalti a favor del Silla en el minuto 72 después de no pitarlo en una jugada similar en el área contraria. Verdú marcó la pena máxima con tranquilidad y el Silla pasó a encerrarse atrás para defender el empate.