El Villarreal dio una lección de fútbol total en Getafe. Hoy por hoy es el equipo más en forma de LaLiga. Con un once muy distinto al de la Europa League, con ocho variaciones respecto al que goleó al Maccabi, barrió del campo al Getafe en el Coliseum Alfonso Pérez y pudo obtener una goleada más amplia que el 1-3 final. La superioridad absoluta desde el minuto 1 al 95. Y da la sensación de que no ha alcanzado su punto álgido de rendimiento. Unai Emery ha conseguido que este Villarreal no tenga un estilo definido. Sí, suena a crítica, pero en la indefinición se halla la virtud de este equipo que juega al fútbol de esmoquin como nadie, se faja en el fango como los equipos que quieren ser competitivos desde ya media hora antes de que empiece el partido y también sabe moverse con armoniosa disciplina sobre el terreno de juego. Es como si el entrenador hubiera metido en la coctelera los conceptos talento, calidad, trabajo, precisión, velocidad, ritmo, sacrificio, inteligencia, versatilidad, experiencia, frescura, chispa, alegría, ambición... y de todo ello saliera un Submarino que es pura maravilla.

Hablar de que este equipo se mueve con un 4-4-2 es engañoso. Lo es porque la movilidad de los jugadores amarillos es tal, que encasillarlos en un dibujo es casi un menosprecio. El Villarreal de Emery en Getafe fue una sociedad de sociedades. En ella, se puede observar a Gerard achicando un balón en el área propia, o a Mario dando una asistencia de gol en el punto de penalti a Paco Alcácer. ¿Y Trigueros? El talaverano dio un máster de inteligencia, talento y tributo al juego colectivo. Se colocó entre líneas para asistir con esa precisión de cirujano que le distingue, pero también se puso el delantal para hacer el trabajo sucio. Su partido en Getafe fue un escándalo.

Los amarillos dejaron también trazos estéticos en el apartado técnico de visionado para los niños. La asistencia de Paco Alcácer en la jugada del 1-2 o el remate de Gerard, acomodando el cuerpo en el 1-3, fueron piezas para los amantes del fútbol exquisito. Pequeños bocatto di cardinale de un Villarreal que busca la perfección pero no se conforma con ella. Quiere más. Su fútbol es rico y versátil. Juega por dentro con Moi y Trigueros, por fuera con las internadas de un Pedraza, que no sabe si su oficio es el de extremo o el de lateral, porque se siente pluriempleado en ambas facetas.

En el camino, Parejo ofrece acciones como el pase largo del 0-1 e Iborra impone equilibrio, es el hombre que se encarga del termostato que regula el frío en ataque y defensa, quien muestra que Alcácer es un 9 de fábula, con la virtud del gol, pero que detrás de él también están Albiol y Pau, repartiendo beneficios para el grupo con su inmensa jerarquía en la zaga. Como el lema de los mosqueteros: uno para todos y todos para uno. Con todo ese cóctel, el Villarreal ofreció un recital en Getafe. Bordalás se vio desbordado. Esperaba un Villarreal con magia, pero no un equipo al que no se sabe por dónde meterle mano, porque este bloque es rocoso, aguerrido y solidario.

A la media hora ya había decido una sustitución al sacar a Ángel por Cabaco. El Villarreal ahora te sorprende por una banda o con una pared inverosímil. Y como pólvora tiene para dar y vender, pues el resultado es convertir al Getafe en un equipo blando y superado. El Villarreal no se dejó toser y su superioridad fue abusiva. ¿Tiene techo este Villarreal? De momento parece que no.

-- Ficha técnica:

1.- Getafe: Soria; Cabaco (Ángel, m. 32), Djené, Chema, Nyom; Maksimovic, Timor (Jaime Mata, m. 46), Arambarri, Cucurella; "Cucho" Hernández y Enes Ünal (Mollejo, m. 46).

3.- Villarreal: Asenjo; Mario, Albiol, Pau Torres, Pedraza; Iborra, Trigueros, Parejo (Coquelin (m. 73), Moi Gómez (Estupiñán, m. 87); Alcácer (Bacca, m. 63) y Gerard Moreno (Kubo, m. 86)

Goles: 0-1, m. 11: Alcácer. 1-1, m. 16: Arambarri; 1-2, m. 17: Trigueros; 1-3, m. 62: Gerard Moreno.

Árbitro: Martínez Munuera. Mostró cartulina amarilla a Timor (m. 42) y a Ángel (m. 52) por parte del Getafe, y a Moi Gómez (m. 21), Iborra (m. 27), Trigueros (m. 65) y Pedraza (m. 92), del Villarreal.

Incidencias: partido correspondiente a la novena jornada de LaLiga Santander disputado a puerta cerrada en el Coliseum Alfonso Pérez de Getafe.