El Villarreal perdió su partido de preparación más serio de la pretemporada ante Boca Juniors por un solitario gol de Pavón. Un choque que tuvo poco de amistoso y en el que más bien parecía haber tres puntos de oro en juego a tenor de por cómo se empleó el conjunto argentino. Luces y sombras en el Villarreal. Cosas buenas y otras que hay que mejorar a tres semanas del inicio de la Liga, aunque al equipo que saltó a la Bombonera le faltaban hombres importantes como Bruno Soriano, Roberto Soldado, Jaume Costa, Cheryshev o el turco Unal entre otros. Buena la primera parte de los amarillos, con un fútbol control similar al de la pasada temporada, bien cosido tácticamente y con solvencia defensiva, a pesar de la falta de acoplamiento de un hombre llamado a ser importante como Semedo.

CONTROL INICIAL DEL VILLARREAL

Positiva la progresión de Rodri, el talento aderezado de trabajo de Samu Castillejo y el timón de Trigueros. Por contra, muy poca fuerza e imaginación en ataque. Ni Bakambu ni Sansone lograron hacerle cosquillas a la zaga xeneize. Al Villarreal le faltó un referente en ataque. Precisamente esa sensación de no hacer daño al riva,l fue el gran punto débil de este equipo de Escribá. Bakambu sin Soldado es como una paella sin arroz. Y al Submarino, precisamente, lo que faltó en la Bombonera fue malicia y ese espíritu ganador y ambicioso necesario, junto con la veteranía de hombres importantes como Jaume Costa, Bruno o Soldado.

MUCHO BALÓN, POCO PELIGRO

Boca fue un buen termómetro para calibrar las virtudes y los defectos. Está bien tener el balón, pero es mucho más importante saber lo que haces con él. Eso fue, precisamente, lo que no supo hacer el Submarino. Otro dato importante, la marcha de Jonathan Dos Santos se deja notar. Pablo Fornals posee más talento que el mexicano, sin duda alguna, pero todavía no tiene el poso como futbolista del ya jugador de los Galaxy.

El Villarreal mandó del balón durante la primera parte, fiel a su estilo de mimar la pelota. Rodri y Manu Trigueros marcaron el ritmo del encuentro, con una circulación muy rápida del juego, pero con escasas llegada a la portería de Rossi. Por contra, Boca Juniors alcanzó el área en más ocasiones poniendo en algún apuro al guardameta amarillo. Buen ritmo de juego del Submarino que salió sin complejos en un estadio que respira un ambiente de fútbol muy especial.

Los hombres de Escribá ejercieron el mando absoluto en el primer acto en un rondo con los de Guillermo Barros Schelotto persiguiendo el esférico de un lado para otro. La movilidad y la velocidad de Samu Castillejo, junto con el talento de Soriano reflejaron la superioridad técnica y táctica de los amarillos en los primeros 45 minutos, con Boca totalmente encerrado en su campo.

UN VILLARREAL INOFENSIVO

Al Villarreal le faltaba, sin embargo, un punto de malicia y remarcar su superioridad con ocasiones y llegadas. Samu puso el primer aviso en un media volea que se le marchó un tanto alta. La oportunidad más clara, y casi la única del Submarino en Buenos Aires, la tuvo Bakambu, pero al congoleño se le adelanto casi en la misma raya de meta el lateral zurdo Fabra que evitó el primer gol del Submarino.

Al descanso se llegó con empate a cero en lo que era el primer partido del Villarreal en su historia en el continente americano contra uno de los grandes clubs del mundo: Boca Juniors. Un choque que servía para celebrar la estrella número 66 del conjunto bonaerense, flamante campeón de Liga en Argentina. El único precedente entre ambos club fue disputado en Vila-real, en el campo entonces denominado de El Madrigal y que concluyó con victoria amarilla por 5-3.

BOCA DESPIERTA TRAS EL DESCANSO

La segunda parte fue diferente. Muy distinta. Fran Escribá solo introdujo un cambio, dando entrada a Andrés Fernández por Mariano Barbosa. El Villarreal continuó con su clásico 4-4-2, mientras el conjunto xeneize mantuvo el 4-3-3, pilotando su juego a través de Gago.

Boca adelantó la presión sobre la salida del balón el conjunto argentino, intentado cortocicuitar el fútbol de control del Submarino, que había dejado desaparecido a los locales. El exjugador del Real Madrid empezó a ejercer su jerarquía sobre el juego de los xeneizes. Gago tejió sociedades y el Villarreal pasó sus peores momentos. La defensa amarilla, más descosida que en el primer tiempo, comenzó a mostrarse más endeble. Una pared perfecta entre Gago y Cristian Pavón levantó por los aires al Villarreal y Boca se adelantó en el marcador en el minuto 53, en un tiro cruzado que superó a Andrés.

CUATRO CAMBIOS DE GOLPE

El orden habitual que distingue a los amarillos empezaba a dar síntomas de debilidad y Boca tomó aire y un impulso. Escribá recompuso líneas e introdujo cuatro cambios. Pablo Fornals, Bonera, Víctor Ruiz y Leo Suárez sustituyeron a Álvaro, Manu Trigueros, Semedo y Samu Castillejo.

PARTIDO POCO 'AMISTOSO'

El Villarreal perdió el control que había tenido en la primera y Boca impuso su genio y la veteranía y experiencia de hombres como Gago, Cardona o Barros. El partido no tenía nada de amistoso ni de homenaje. No había tres puntos en juego, pero sí algo más importante cuando un equipo argentino juega: el orgullo. La intensidad que los bonaerenses imprimieron en cada acción espoleó al Villarreal que también subió su velocidad de crucero y empezó a enseñar las uñas.

ANDRÉS DETIENE UN PENALTI A GAGO

El extremo argentino, cedido por el Villarreal a Boca, Espinoza, salió en la segunda parte y provocó un centro medido sobre el área grogueta que fue interceptado con el brazo por Bonera. El árbitro no lo dudó y señaló penalti. Gago, el mejor jugador de los bonaerenses, lanzó la pena máxima pero Andrés le adivino la intención y evitó el 2-0.

El Villarreal no conseguía pisar área y poner en aprietos al portero Rossi. Escribá ordenó un rosario de cambios y saltaron al campo jóvenes de la cantera como Ramiro Guerra, Darío Poveda o Pau. La Bombonera cantaba. Para ellos no hay tregua. Ni en un simple entrenamiento. Para un futbolista de Boca ganar siempre es ganar. Es su código innegociable. Va con el escudo. El Villarreal no se encontraba a sí mismo y los minutos pasaban. Rossi estaba feliz viendo el choque desde su portería como uno más de la afición xeneizes. La Bombonera debe servir como un test que evalúe lo bueno y lo malo a tres semanas de la competición oficial.

FICHA TÉCNICA

Boca: Rossi; Jara, Vergini, Magallón, Fabra; Gago, Barrios, Pérez; Pavón, Bou y Cardona. También jugaron Cristian Espinoza, Maroni y Júnior Benítez.

Villarreal: Barbosa; Mario, Álvaro, Semedo, Rukavina; Samu Castillejo, Rodri, Trigueros, Soriano; Sansone y Bakambu. También jugaron Andrés, Bonera, Fornals, Leo Suárez, Víctor Ruiz, Dario Poveda, Ramiro Guerra y Pau.

Árbitro: Facundo Pérez Figueroa. Amonestó a Bonera.

Gol: 1-0. Min. 53: Pavón.

Incidencias: Primer partido del Villarreal en América, como homenaje a la Liga número 66 lograda por Boca.