El Villarreal cerró el domingo una década desastrosa en Barcelona, ya que nunca el equipo amarillo había firmado peores números como visitante en ningún otro campo en los que ha jugado habitualmente desde que llegó a la máxima categoría.

Lo que está viviendo el equipo amarillo desde 2010 hasta hoy, en sus visitas al campo del Fútbol Club Barcelona, es un suplicio en el que suman diez derrotas y una media de 3,3 goles en contra por partido.

Curiosamente el feudo blaugrana fue durante la primera década del Villarreal en Primera División el mejor campo de los llamados grandes, ya que fueron capaces de ganar tres partidos y empatar otros tres, sumando solo cuatro derrotas. Pero esos buenos registros se truncaron hace diez temporadas y hasta la fecha, ya que tras un empate en la campaña 09-10, el equipo castellonense suma diez derrotas seguidas. Una serie de partidos en los que han recibido 33 goles en contra, marcando solo siete goles a favor.

Una situación que no tiene comparación con ninguna otra, ya que los peores registros del Villarreal se daban en el Bernabéu, aunque nunca llegaron a ser tan malos. El Villarreal sumó diecisiete temporadas sin ganar en Madrid, pero arrancó varios empates, acumulando seis partidos seguidos sin ganar.

Esta mala estadística se puede extrapolar a su entrenador Unai Emery, que debuta esta temporada en el banquillo del Villarreal, pero que también sufre una estadística terrible en sus visitas al Camp Nou, donde no solo nunca ha ganado con ninguno de los diferentes equipos que ha dirigido, sino que con la del domingo suma doce derrotas consecutivas.