El Villarreal parte, una vez más, entre los favoritos para alzarse con el campeonato liguero, más si cabe defendiendo por segunda vez el título de liga revalidado la pasada temporada.

El técnico Javi Calleja cuenta temporadas por campeonatos conseguidos, si bien es cierto que la exigencia en un juvenil como el groguet es enorme. Cabe destacar que el equipo amarillo no disputará finalmente la UEFA Youth League después de que el primer conjunto de la entidad no pudiera superar al Mónaco en los play-offs de la Champions League y, en consecuencia, acceder a la fase de grupos de la máxima competición. De este factor dependía el pasaporte del juvenil para volver a la competición europea.

Pese a ello, las expectativas son máximas para este ejercicio 2016/17 en el que los de la Plana Baixa tratarán de imponerse en todas la competiciones que disputen, Liga, Copa y, en caso de alcanzarla, la Copa de Campeones.

La estrategia para conseguir pugnar por cada logro será la de siempre, buen trato de balón, juego elaborado, rehusar el fútbol directo y el patadón. En definitiva, el sello del Villarreal. Este temporada, como viene siendo habitual, hay muchos cambios en la plantilla. La mayor parte de los jugadores que el año pasado se erigieron en pilares han subido al Villarreal C para competir en Tercera División, caso de Pau Torres, Chuca, Pablo Álvarez, Darío Poveda, Nicola o Akale. Sin embargo, continúa uno de los puntales en la delantera, el ariete Villa.

Muchas novedades // En el apartado de incorporaciones llegan hasta 14 futbolistas nuevos procedentes del juvenil del Roda, con lo que ya poseen al menos un año de rodaje en División de Honor. Entre ellos destaca el joven atacante Dani Liñares.

Por otro lado, recalan en el equipo algunos efectivos de fuera de la propia entidad: el arquero Nicolás, del Barcelona, y los atacantes Morad y Alejandro, que provienen del Torre Pacheco y del Zaragoza.

Con todo, el técnico Javi Calleja dispone de una plantilla muy amplia con jugadores polivalentes y con diferentes perfiles. Este Villarreal volverá a ser una escuadra realmente temible para cualquier contrincante, muy competitiva y, como siempre, partiendo desde un juego de muchos quilates. H