Para ver perder al Villarreal por cuatro tantos en Europa hay que remontarse al 28 de abril del 2011. El Oporto venció entonces por 5-1 al equipo amarillo, que no pudo detener el torrente goleador de un equipo liderado por Falcao, que acabó esa noche aciaga para los intereses amarillos con cuatro goles. Ayer Dzeko se vistió de Falcao para amargar la noche a los aficionados amarillos que acudieron al Estadio de la Cerámica con la intención de ver una gran noche de los suyos.

Lo cierto es que el delantero de la Roma llegaba en plena forma y confirmó su gran momento, pues con su actuación de ayer ha firmado siete goles en los últimos seis partidos, sumando 24 goles entre Liga y Europa League.

«No dejamos espacios en defensa y en la delantera lo hicimos muy bien. El Villarreal es un equipo fuerte pero fuimos fantásticos», reconocía el protagonista Edin Dzeko a la conclusión, añadiendo que quiere demostrar «aún más» en su etapa en Italia.

SIN PRECEDENTES // El Villarreal nunca había perdido en casa por cuatro o más goles en Europa en toda su historia. De hecho, para ver recibir cuatro tantos a los amarillos en su estadio hay que remontarse a mayo del 2010, cuando entonces el FC Barcelona venció por 1-4 en el campeonato doméstico. Las peores derrotas en Liga de Campeones o Europa League habían llegado hasta ahora a domicilio, siendo el 0-3 del Manchester City en la última participación de Champions la peor derrota en el entonces Madrigal.

Antes del 5-1 encajado en Oporto en las semifinales de la Europa League 10/11, el partido con peor resultado en competición continental fue el 4-1 recibido ante el Wolfsburgo alemán en la campaña 09/10, que supuso también la eliminación. Para encontrar más derrotas abultadas hay que remontarse a la campaña 08/09, cuando perdió ante el Arsenal en Londres por 3-0 en el partido de vuelta de los cuartos de final de Champions. También cayó 3-0 la pasada temporada en el partido de vuelta de semifinales ante el Liverpool en Europa League.

SIN PRECEDENTES // El 16 de febrero del 2017 no es el único día en la historia en la que un equipo español ha perdido contra un italiano en casa por cuatro goles. Las mayores victorias de los transalpinos en territorio nacional se remontan al 1992, cuando el Valencia cayó por 1-5 frente al Napoli, al 2002 con el 0-4 encajado por el Deportivo a manos del Milan, así como el 1-5 más reciente sufrido por el Valencia en Mestalla contra el Inter de Milán.