Aunque ya está en Londres, donde fue recibido como la estrella que se había apagado en Madrid, Gareth Bale sigue siendo el tema de conversación en torno al madridismo. También en la primera rueda de prensa de la temporada de Zidane, antes de empezar La Liga este domingo ante la Real Sociedad, donde el galés fue el tema recurrente de las preguntas. Por mucho que el técnico francés quiera dotar de normalidad a un caso que no la tiene, también quiso dejar algunas cosas claras ante la inminente salida de Bale.

“No hablé con él antes de su viaje a Londres”, aseguró Zidane sin dejar un atisbo a la duda. “No es así”, sentenció después con firmeza sobre su responsabilidad en la salida del galés, antes de ampliar sin mucho contenido sus respuestas sobre el caso: “No me quito un peso de encima. Yo no voy a hablar del jugador, todos sabemos lo que ha hecho Bale siete años en el Madrid. Luego está lo que él quiera hacer ahora, yo no voy a entrar en eso. A lo mejor no jugó como debería al final, por varias cosas, pero yo nunca he tenido problemas con él, eso no ha pasado”, explicó después en varias respuestas el entrenador blanco, sin querer hacer leña del árbol caído, pero también sin regalarle un elogio más de lo necesario a la antigua estrella saliente.

Mismos problemas y mismas ilusiones

En medio de las dudas ante otra temporada con casi la misma plantilla que el último lustro: “Este es el equipo con el que hemos ganado. Si jugamos como a la vuelta del confinamiento, vamos a tener oportunidades de ganar cosas”, reivindicó Zidane; el otro tema recurrente entre las preocupaciones del madridismo es el estado de salud de Eden Hazard, el gran fichaje del curso pasado que aún está por asentar. Ante los problemas del primer año, el Madrid ha tomado la determinación de esperar lo que sea necesario para que el belga vuelva sin ningún problema físico: “No puedo decir cuándo va a volver exactamente. Lo importante es que esté al cien por cien y sin molestias, tenemos tiempo y no hay prisa”, insistió Zidane.