4 Years From Now (4YFN), el salón dedicado a las start-ups paralelo al Mobile World Congress, ha dado un salto de calidad en la presente edición. Uno de los propósitos para este año de los organizadores, con Pere Duran como director a la cabeza, era internacionalizar el encuentro, y tan solo hace falta darse una vuelta por los pasillos del Pabellón 8 para comprobar que, efectivamente, el objetivo se ha cumplido. Una buena muestra del alcance global del evento es que las empresas emergentes españolas tan solo suponen un tercio del total de start-ups participantes, mientras que el resto son extranjeras.

«Para nuestras empresas venir a un evento como este es una gran oportunidad, sobre todo por la visibilidad que supone. Además, en las ferias de este tipo siempre surgen oportunidades de negocio y de conseguir financiación», explica Pedro Cordero, coordinador de proyectos de JETRO (Japan External Trade Organization) en España. A pesar de ser un país tremendamente innovador, Cordero comenta que el ecosistema start-up no está demasiado desarrollado en el país del sol naciente. «En Japón lo más habitual es acabar los estudios y hacer carrera durante toda la vida en una misma empresa», comenta el representante de Jetro. No obstante, cada vez hay más emprendedores, y por eso el gobierno nipón ha decidido participar por primera vez en el 4YFN, presentando un total de 20 proyectos empresariales relacionados con la robótica, los drones y la salud digital, entre otros sectores.

Taiwán (12 start-ups), Reino Unido (11) Grecia (10) o Colombia (7) son algunos de los países que han contado con delegaciones nacionales oficiales más numerosas. Corea del Sur ha vuelto a ser el país extranjero más representado en el 4YFN, tal y como ya sucedió el año anterior, con alrededor de 70 empresas participantes, entre las que se pueden encontrar propuestas de alta tecnología y también proyectos algo excéntricos. Por ejemplo, unos jóvenes coreanos presentaban el Jetride Ball Pen, un bolígrafo con ruedines incorporados que permite «dibujar líneas completamente rectas sin necesidad de utilizar una regla». Si se deseaba era posible comprar el artilugio en el mismo estand por un precio de 3 euros.

Además de las delegaciones nacionales, algunas entidades regionales también han establecido sus propios expositores, como la región francesa de Occitania, Valonia o el País Vasco a través de la aceleradora público-privada Bind 4.0.

Jordania es otro de los países que ha tenido una presencia relevante en el certamen. En este caso, ha sido una organización privada, la empresa kuwaití de telecomunicaciones Zain, la que ha auspiciado la participación en el 4YFN de 8 start-ups jordanas. La colaboración entre grandes corporaciones y empresas emergentes ha sido, precisamente, otra de las tendencias. «Trabajamos con todo tipo de compañías, ya que en nuestro negocio la innovación puede llevarse a cabo en campos muy diversos.

Ahora, por ejemplo, estamos colaborando con una start-up especializada en blockchain para desarrollar un nuevo programa de fidelización de clientes», comenta Simone Van Neerven, directora de innovación de Vueling. La aerolínea con sede en Barcelona participa en la aceleradora Hangar 51 junto con todas las compañías del grupo IAG. Repsol, Telefónica (Wayra), Correos, Deloitte o Intel son otras de las corporaciones que y que han presentado algunas de las compañías a las que apadrinan y de las que, en muchos casos, poseen participaciones accionariales.

Acció, de la Generalitat, ha organizado reuniones entre 150 start-ups y 20 multinacionales -Henkel, Celsa, Nissan y Bayer, entre otras- para fomentar los procesos de innovación abierta entre empresas emergentes y firmas consolidadas.