Los autónomos son favorables a aumentar sus cotizaciones a la Seguridad Social pero alertan sobre la posibilidad de que una mayor presión sobre sus ingresos les vuelva a colocar en la economía sumergida o a distorsionar los rendimientos de su actividad. Sin embargo dos de las organizaciones del sector, ATA y UPTA, discrepan sobre la forma en que aumentarían estos ingresos en el régimen especial de cotización de autónomo (RETA) y en los efectos de las tarifas planas.

En la comisión del Pacto de Toledo del Congreso de los DiputadosEduardo Abad, presidente de UPTA, ha defendido un aumento de las bases míninas de cotización para los trabajadores por cuenta ajena que tengan unos ingresos anuales superiores a los 60.000 euros (unos 350.000), lo que permitiría aumentar la recaudación en 1.400 millones si el incremento es del doble de la cuota actual. Por el contrario los que tuvieran unos ingresos inferiores a 9.000 euros quedarían exentos del pago de la cuota social.

También ha propuesto un sistema de aportaciones progresivas con cotizaciones flexibles. La fórmula sería establecer varios tramos de cotización para que las rentas mas bajas "no hagan un sobreesfuerzo".

DESEQUILIBRIO

En opinión de Abad, tal y como está organizado en la actualidad, el RETA no responde a los principios de contributividad y solidaridad porque obliga a los que tienen ingresos menores a cotizar por bases superiores a las que tendrían en el régimen general. De los cerca de 3,2 millones de autónomos que cotizan actualmente, 2,14 millones lo hace por la base mínima. El desequilibrio se produce porque el gasto mensual en pensiones de los autónomos asciende a los 1.227 millones cuando la recaudación por cuotas no llega a los 1.000 millones.

Tambien Lorenzo Amor, presidente de ATA, ha propuesto medidas para aumentar los ingresos hasta unos 7.200 millones. Una de ellas, la subida a lo largo de cinco años de un 10% de las bases medias, que hoy están en 1.100 euros mensuales, permitiría obtener 2.000 millones de euros.

Amor considera "imprescindible" facilitar que los autonomos puedan elegir que se les compute toda la voda labofal para el claculo de la pensión y ha reconocido que este colectivos recibe más de lo que aporta, como sucede con los asalariados. Según sus datos un trabajador por cuenta propia que se jubile hoy habrá contribuido al sistema, por término medio, con 96.000 euros, mientras que cobrará unos 168.000 euros durante sus años de retiro, 72.000 euros más de lo cotizado.

Para ATA, organización mayoritaria en el sector, los 382.000 administradores societarios podría pasar cotizar, dentro del RETA, en un régimen similar al general, pero sin cotizar por el Fogasa y el desempleo, y que los las cuotas y sus correspondientes retenciones sean declarados como gastos de la sociedad, lo que obligaria a un entendimiento entre Hacienda y la Seguridad Social. Ello permitiría ingresar 1.500 millones de euros más al año.

Los efectos de las tarifas planas en la contratación de los autónomos es lo que aleja a ambas organizaciones. Mientras que para UPTA las bonificaciones están produciendo "grandes desquilibrios", para Amor es la "mejor política activa" que se puede tener porque ha permitiso aflorar unos 350.000 nuevos cotizantes y beneficiar a cerca de 650.000 contratados que siguen pagando sus cuotas.