Los bancos españoles aplicaron una "ligera contracción" a su oferta de crédito a empresas y familias en el cuarto trimestre del año pasado, con un cierto endurecimiento tanto de los criterios de concesión como de las condiciones de los nuevos préstamos, salvo en las hipotecas. Así lo han confesado al Banco de España en la última edición de su periódica encuesta sobre la evolución del crédito, en la que también afirmaron haber constatado una pequeña disminución de la demanda.

El informe del organismo supervisor achaca el endurecimiento al "aumento de los riesgos percibidos por las entidades financieras, vinculado al deterioro en las perspectivas, tanto sobre la situación económica general como sobre la solvencia de prestatarios y sectores concretos". Es decir, que los bancos prevén que la brutal recesión del 2020 causada por la pandemia y la insuficiente recuperación prevista para 2021 aumenten los impagos, por lo que conceden menos préstamos para protegerse de ese aumento de la morosidad.

La línea de créditos a empresas avalados por el Estado a través del Instituto de Crédito Oficial (ICO) provocó un incremento del crédito a mediados del año pasado, ya que las compañías se vieron obligadas a cubrir sus acuciantes necesidades de liquidez ante el parón de los ingresos que provocó el confinamiento. Desde entonces, sin embargo, la financiación al sector privado viene cayendo y cada vez más voces advierten de que lo que necesitan ahora las empresas son refinanciaciones de sus préstamos e inyecciones de capital, no nuevos créditos.

Previsiones para el primer trimestre

Las diez grandes entidades encuestadas prevén seguir cerrando el grifo del crédito este primer trimestre con un nuevo "ligero endurecimiento" en los criterios de concesión de préstamos a las empresas, si bien en los créditos a los hogares no proyectan "variaciones significativas". Por el lado de la demanda, esperan que siga cayendo tanto la de las compañías como las de hipotecas, pero que se mantengan las de créditos al consumo.

No se trata de un fenómeno exclusivamente español. Según los datos del Banco Central Europeo (BCE), el conjunto de los bancos de la zona euro endurecieron el crédito entre octubre y diciembre del año pasado, salvo en el crédito a las familias para consumo. Cayó, asimismo, la demanda salvo la de hipotecas, que registró un "ligero" ascenso. Para el presente trimestre, las entidades comunitarias esperan una "prolongación de la contracción de la oferta en todas las modalidades".