La amenaza del presidente de EUU, Donald Trump, de introducir nuevos aranceles a determinadas importaciones europeas por valor de 11.000 millones de dólares, a causa del daño producido por los subsidios a la europea Airbus, rival de Boeing, ya tiene respuesta de la Unión Europea. El Ejecutivo comunitario ultima también una lista de productos estadounidenses que se verán afectados por la imposición de aranceles con un valor de 19.000 millones de euros, según han confirmado fuentes diplomáticas europeas.
La UE y EEUU llevan catorce años de disputas en la Organización Mundial del Comercio (OMC) a causa de los subsidios a Airbus y Boeing. Ambas partes se acusan mutuamente de inyectar millones en ayudas públicas, contrarias a la normativa internacional, para apoyar a ambas multinacionales. Este pasado lunes la Administración estadounidense anunciaba que había perdido la paciencia y publicaba una lista de artículos europeos que se verán afectados por aranceles, que incluye desde queso, vino y ropa de esquí hasta helicópteros para pasajeros. Su intención es esperar a verano para aplicarles.
La Comisión Europea, responsable de negociar la política comercial en nombre de los 28, no se ha quedado a la zaga e informó este jueves a los embajadores permanentes de la UE que remitirá a consultas la próxima semana un listado indicativo de productos en el marco de las contramedidas por el caso Boeing. La decisión de Bruselas responde, según fuentes comunitarias, a la adopción esta semana por parte de la OMC del informe final sobre el caso Boeing que confirma que Estados Unidos no ha cumplido con las reglas de la OMC. En cuestión, subsidios ilegales en forma de beneficios fiscales del estado de Washington, que habrían perjudicado las ventas de Airbus.
El valor total de los aranceles que baraja la Comisión Europea asciende a 19.000 millones de euros que se aplicarán a productos correspondientes a tres categorías: bebidas y alimentación, marroquinería y productos de joyería así como productos aeronáuticos. Se trata de una cifra muy superior para la que Bruselas solicitó autorización a finales de 2012 a la OMC. Entonces el posible impacto en 12.000 millones de euros. La cifra final dependerá de la decisión del arbitraje en Ginebra.
¿NUEVO ACUERDO COMERCIAL?
Este nuevo enfrentamiento arancelario coincide con la aprobación de los 28 del mandato negociador a la comisaria de comercio, Cecilia Malmström, para que inicie las negociaciones de un nuevo acuerdo comercial sobre productos industriales. La decisión fue avalada este jueves por los embajadores y será aprobada este próximo lunes en el Consejo de ministros de la UE sin discusión alguna. No todos los gobiernos europeos comparten la idoneidad de lanzar las negociaciones en este momento.
El presidente francés, Emmanuel Macron, teme que este asunto se convierta en una bomba de relojería que termine estallando en la precampaña a las elecciones europeas de finales de mayo y esgrime como elemento principal de oposición el hecho de que Washington se opone al Acuerdo de París sobre clima. Es una cuestión de equidad en nuestras relaciones comerciales y de valores, sostienen fuentes francesas sobre los motivos de su negativa.
Aunque las negociaciones se centrarán en las áreas menos problemáticas, como la eliminación de aranceles a los productos industriales y dejarán al margen los productos agrícolas, a Francia no le ha bastado. En vista de la posición de Estados Unidos sobre el Acuerdo de París y las presiones comerciales ejercidas en las últimas semanas por Estados Unidos, Francia no puede apoyar tal negociación comercial, aseguran las mismas fuentes.
