La Comisión Europea tiene previsto proponer de manera «inmediata» el almacenamiento privado de aceite de oliva para ayudar a los productores españoles afectados por la caída de los precios como consecuencia de una cosecha récord, anunció ayer el comisario europeo de Agricultura, Phil Hogan. El alto representante europeo señaló, durante un debate sobre la situación de los mercados agrícolas, que el aceite de oliva y la aceituna de mesa se encuentran entre las mayores «preocupaciones» de Bruselas.

«La situación es muy difícil, en gran parte debido a cosechas excepcionalmente altas que provocan precios bajos, especialmente en España, el principal productor», dijo. La Comisión considera que «un esquema de almacenamiento privado es el mejor instrumento para dar un apoyo importante al sector» y que a tal efecto presentará una propuesta inmediata.

El ministro español de Agricultura, Pesca y Alimentación en funciones, Luis Planas, ya había avanzado que esa medida sería «una noticia muy positiva e importante» para un sector que, «con independencia de los aranceles, ha atravesado una campaña de tobogán de precios» derivada de «la altísima producción de este año».

Según Hogan, «las expectativas de una fuerte producción en terceros países pueden presionar aún más los precios ya bajos». Hogan precisó que esa situación de desajuste entre oferta y demanda ya se daba antes de la reciente decisión del Gobierno estadounidense de imponer aranceles a las exportaciones españolas de aceite de oliva y aceitunas verdes.

Para la próxima cosecha, el sector teme que la actual situación de falta de lluvias y altas temperaturas suponga un recorte de la producción de al menos el 40% en España, pero esos altibajos no se ven compensados con alzas de precios a los productores por el elevado control de la gran distribución. Además, existen grandes diferencias de costes entre explotaciones agrarias.