Los consensos en Europa son difíciles, si no casi imposibles. La elección de candidato para ser director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI) en sustitución de Christine Lagarde, que el 1 de noviembre pasará a ser presidenta del Banco Central Europeo (BCE) es una nueva muestra.

El proceso, que se retrasó al viernes para hacerlo mediante una votación y conseguir un acuerdo, está bloqueado. Y eso a pesar de que de cinco aspirantes con los que empezó se ha quedado solo en dos: el holandés y expresidente del Eurogrupo, Jeroen Dijsselbloem; y la excomisaria europea y directora ejecutiva del Banco Mundial, Kristalina Georgieva.

La segunda ha obtenido más apoyos en las votaciones, pero no los suficientes para batir a Dijsselbloem, según fuentes comunitarias. Para ganar la candidatura hay que sumar la representación del 65% de la población, según el mecanismo de mayoría cualificada que se emplea.

El Gobierno español ha decidido retirar la candidatura de la ministra de Economía en funciones, Nadia Calviño, tras una primera vuelta de votaciones. Fuentes del Gobierno español aseguran que con esta decisión se busca el consenso para encontrar un candidato europeo para el cargo.

El excomisario europeo y presidente del Banco de Finlandia, Olli Rehn, ha hecho lo propio poco antes de que se llevara a cabo la segunda tanda de votaciones. En la víspera lo hizo el presidente del Eurogrupo y ministro de Economía portugués, Mário Centeno.

La elección se limita ahora a un duelo entre el bloque de países del Norte y los del Este. Dijsselbloem cuenta con el aval alemán, mientras que Georgieva es la candidata que apoya París.

Desde La Moncloa aseguran que España estará siempre dispuesta a promover el consenso entre los países de la Unión Europea para elegir una candidatura común a la dirección del FMI. Es por ello que el Gobierno ha decidido retirar la candidatura, por su apuesta por lograr un acuerdo europeo, sin que la ministra de Economía Nadia Calviño participe en la siguiente fase.

Calviño ha dicho que ha sido un gran honor formar parte de la lista de candidatos, de la que forman parte personas de reconocido prestigio.

Al no alcanzar un acuerdo, los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE) decidieron elegir mediante votación por email el candidato o candidata. Pero ni siquiera así están logrando consensuar un candidato.