Casi seis millones de trabajadores asalariados tiene empleo pero vive en condiciones de pobreza, según los baremos oficiales. Son 5,9 millones de empleados los que cobran sueldos inferiores al salario mínimo interprofesional (SMI), fijado en 655,20 euros mensuales para este año, y representan el 35% del total de trabajadores por cuenta ajena que había en el 2014. Desde que se aprobó la reforma laboral este colectivo ha crecido en 220.000 personas.

La devaluación salarial que ha dejado la crisis se refleja en los datos de recaudación de la Agencia Tributaria que señala que el salario medio ha bajado de los 19.102 euros del 2011 a los 18.420 del 2014, últimos datos oficiales publicados, y recogido por el sindicato UGT en un informe sobre las consecuencias de la reforma laboral de la que ahora se cumplen cuatro años.

Tras la crisis ha aumentado la población en riesgo de pobreza que en España alcanza al 30% de los ciudadanos, cinco puntos más que en el 2009.

MENOS EMPLEO

Como reiteradamente han puesto de manifiesto la encuesta de población activa (EPA) y los datos del paro registrado, la cantidad y la calidad del empleo se ha depreciado en el último lustro. Hay un 3% menos de empleo mientras que la tasa de paro ha crecido en un 0,7%, según UGT, sindicato que considera que la destrucción de empleo se debe sobre todo a la facilidad para despedir que da la reforma laboral a las empresas.

En los últimos cinco años la tasa de actividad ha caído por debajo del 60%, entre otras cosas, porque hay más de medio millón de activos menos en el mercado laboral.

PROPUESTAS AL FUTURO GOBIERNO

En las semanas previas a la formación de Gobierno, los sindicatos UGT y CCOO y las organizaciones empresariales CEOE y CEPYME van a presentar a los partidos políticos que formen el Ejecutivo un documento de objetivos sociolaborales para la próxima legislatura.

La lucha contra el paro mediante el cambio en el modelo productivo, un plan de choque para los parados de larga duración así como un cambio en las políticas activas de empleo, son algunas de las reclamaciones sindicales, junto con el compromiso de erradicar la pobreza.

Los sindicatos han constatado que hay una mayoría parlamentaria para derogar la reforma laboral, que debería encaminarse a "acabar con la precariedad en el empleo, fortalecer la contratación indefinida y recuperar la causalidad de la contratación temporal", según ha manifestado el secretario de acción sindical de UGT, Toni Ferrer.

En el informe sindical, elaborado con los datos oficiales delMinisterio de Empleo y del antiguo Inem se destaca que la contratación temporal ha crecido el 66,4 % frente al aumento del 11,8 % de la contratación indefinida.

MAYOR TEMPORALIDAD

El 24% del total de los contratos firmados el año pasado tuvieron una duración máxima de siete días, mientras que antes de la reforma representaba el 20%. Aunque la reforma laboral no ha cumplido con uno de los objetivos más proclamados cuando se aprobó, como era acabar con la temporalidad, sí ha empeorado la precariedad ya que el contrato a tiempo parcial ha despuntado con fuerza.

Desde febrero del 2012 el número de contratos a tiempo parcialha crecido el 70%, 13 puntos más que la contratación a tiempo completo. A finales del año pasado el 40,6% de los contratos indefinidos y el 32,5% de los temporales tienen una jornada laboral parcial.