El aumento de la contratación temporal o a tiempo parcial es una de las razones de la recuperación del empleo en España pero está dejando una mercado laboral en el que abunda la baja cualificación y los escasos salarios. Con una tasa de desempleo juvenil de las más altas de la Unión Europea (46,5%), los trabajadores de menos edad son los paganos de esta situación en sectores, además, que están contribuyendo a la recuperación (comercio y servicios), pero que no ofrecen seguridad cara al futuro. En esta situación la temporalidad alcanza a casi tres de cada cuatro jóvenes de entre 16 y 24 años (el 70,8%), según un estudio de Asempleo, la patronal de las empresas de trabajo temporal (ETT).
El estudio pone de relieve que la temporalidad no afecta solo a los jóvenes y confirma que se está extendiendo con la salida de la crisis. Además, se concentra en las actividades de servicios, comercio y hostelería, fundamentalmente, que actúan como locomotora en la reactivación económica. Pero también se trata de trabajos en los que se realizan actividades básicas, una situación en la que se encontró el 60% de los jóvenes que encontró su primer empleo en los tres últimos años.
De los 1,3 millones de nuevos ocupados surgidos al calor de la recuperación, entre el primer trimestre del 2014 y el segundo trimestre del 2916, la mitad han sido asalariados con contrato temporal, lo que ha incrementado en 2,6 puntos la tasa de temporalidad, hasta el 26%, que supone unos 3,9 millones de trabajadores.
"La mayoría de los trabajadores con un empleo temporal procede, en su práctica totalidad, de una situación de paro. Esto supone que es una gran puerta al trabajo y a la adquisición de experiencia", señala Andreu Cruañas, presidente de Asempleo, que destaca la oportunidad que ello supone de entrar en el mercado laboral, o de reingreso si se fue expulsado por la crisis, así como de combinar empleo y estudios para los más jóvenes.
Por el contario, CCOO y UGT consideran que el aumento de la temporalidad no se debe a razones coyunturales, como el mejor comportamiento del sector turistico, sino que obedece a "un patrón tradicional de recuperación basado en la inestabilidad en el empleo".
CONVERTIRSE EN FIJO
El estudio sobre calidad del empleo realizado en colaboración con la Universidad de Alcalá de Henares (Madrid) destaca que la probabilidad de encontrar un primer empleo temporal es 13 veces más alta que de lograr un contrato indefinido. Y aunque el porcentaje de jóvenes con contrato temporal es mayor (16% frente al 3% del resto de ocupados en el segundo semestre del 2016), a los que tienen entre 16 y 24 años se les pone más cuesta arriba pasar de temporal a fijo.
De hecho el estudio destaca, con datos de la EPA, que en el segundo trimestre de este año la probabilidad de que los jóvenes menores de 25 años logren transformar un contrato temporal en indefinido es del 4,5% frente al 6,5% del resto de los empleados.
La hostelería y el comercio son las ramas de la actividad en las que
esta probabilidad es mayor que en otros debido a la mejora de la actividad económica en el conjunto del sector servicios. En los tres últimos años se ha alcanzado una media de 5,1% de probabilidad, que solo ha sido superada por el sector de la industria de construcción de maquinaria y material de transporte que ha llegado a una media del 7,4%.
Las comunidades que ofrecen más posibilidades de dar más oportunidades para que los jóvenes obtengan su primer empleo, son las que también ofrecen más posibilidades de reconversión del contrato temporal en indefinido. Navarra es la que presenta mejor combinación de ambos indicadores. Pero comunidades como Cataluña, en donde la probabilidad de encontrar un primer empleo está en torno al 7% (como la media de España), sí mejoran las posibilidades de subir un peldaño en la cualificación profesional, y así ronda el 50% la posibilidad de pasar del primer empleo temporal a un contrato indefinido.
O más empleo o más salario
La subida salarial que CCOO y UGT llevarán a la mesa de negociación con CEOE y CEPYME dependerá del compromiso de los empresarios para crear empleo. En todo caso la horquilla más probable se situará entre el 1,5% y el 2%. Esto significa que las centrales pueden ceder en su pretensión de una subida de dos puntos si hay datos tangibles de contratación y de reducción de la temporalidad.
Los sindicatos justifican su petición en el crecimiento de la economía y de la productividad. En el documento de orientaciones para la negociación colectiva enviado a las patronales se duda de que el crecimiento económico se modere, como prevé el Gobierno, a la vista de lo ocurrido este año, en el que se espera un crecimiento del 2,9%. También alertan de que el año próximo la inflación puede dejar de ser negativa y llegar al 1,3%, como prevén los analistas de Funcas, y ahondaría en la pérdida de poder de compra de los salarios.
El acuerdo para este año establecía un incremento del 1,5% y apenas se está llegando al 1,1%. De ahí que las centrales concluyan que los aumentos fijados en los convenios son compensados por las retribuciones inferiores de los de los nuevos contratados o los recortes unilaterales que permite la reforma laboral. Para CCOO y UGT todas las mejoras económicas como la productividad, la bajada del precio de las materias primas y de los tipos de interés, "están yendo a engrosar los beneficios empresariales, que ya superan el nivel previo al de la crisis".
