Los sindicatos CCOO y UGT han iniciado hoy domingo en Madrid un proceso de movilizaciones sostenidas con una manifestación por las calles de la ciudad. La protesta culmina un calendario inicial de acciones reivindicativas llevadas a cabo en los días previos en las principales ciudades españolas y cuenta con el apoyo de los partidos de izquierda. Los sindicatos y la oposición reclaman a Mariano Rajoy un cambio en la política del Ejecutivo que vaya más allá de los gestos para dejar atrás claramente los recortes sociales.

La manifestación, convocada a las 12.00 horas, sigue el recorrido habitual de las marchas sindicales del Primero de Mayo y ha congregado a unas 30.000 personas, según los sindicatos. Esta vez, la convocatoria de las protestas se ha llevado a cabo en un tiempo récord ya que se anunciaron justo después de la reunión que tuvieron los líderes sindicales y de la patronal para recuperar el diálogo social y en la que Rajoy vetó la negociación sobre asuntos sensibles como la reforma laboral.

Ignacio Fernández Toxo, secretario general de CCOO, ha indicado que la manifestación tiene lugar en "un momento clave porque se está decidiendo la política presupuestaria para el 2017". "Estamos aquí en defensa de los derechos por los salarios, las pensiones y contra la pobreza", ha indicado Toxo antes de que arrancara la manifestación.

NEGOCIAR MÁS QUE DIALOGAR

Su homólogo de UGT, Josep Maria Álvarez, ha subrayado que la convocatoria de hoy es el "inicio de un proceso de movilizaciones que será sostenido durante el tiempo que sea necesario, lo que dependerá de la capacidad del Gobierno no solo de diálogo, sino de negociar y acordar". Álvarez se refiere así de forma crítica al encuentro mantenido con Rajoy en el que el presidente del Gobierno pueso unas líneas rojas que apenas dejaban margen de negociación, según los sindicatos.

"Hay razones más que sobradas para llevar adelante movilizaciones que hoy iniciamos. El país crece, hay más personas ricas y también más pobres, hay que repartir la riqueza. La nueva legislatura es la de recuperación de derechos", ha indicado.

Tanto Toxo como Álvarez han agradecido el apoyo de los partidos de izquierda y la presencia de dirigentes de sus grupos parlamentarios en la manifestación. Los sindicatos son conscientes de la capacida de presión que tienen esos partidos, especialmente el PSOE, de cara a forzar al Gobierno, por su situación en minoría en el Congreso, a dar marcha atrás en aspectos como la reforma laboral, que dio pie a tres huelgas generales en la anterior legislatura de Rajoy.

"Tenemos un gran recorrido por delante. Quiero pedir a los ciudadanos que nos acompañen en esta lucha que empieza hoy. Hay razones y condiciones para mejorar la vida de la mayoría de los ciudadanos", ha asegurado el líder de UGT.

RESPUESTA DE BÁÑEZ

La convocatoria de movilizaciones ha enconado todavía más la posición del Gobierno. La ministra de Empleo, Fátima Báñez, ha afirmando que "espera a los sindicatos en la mesa de negociación" que es "desde donde hay que trabajar por los españoles". A pesar de la oferta de diálogo y a estudiar otro marco normativo en un contexto de negociación "pacto a pacto", Báñez ha reiterado su defensa a la reforma laboral como uno de los pilares para la salida de la crisis económica en el país y que "están imitando otros países como Francia e Italia". "España es junto con Alemania el país de la UE que más empleo crea", ha asegurado.

"Yo le preguntaría a los interlocutores sociales: ¿no hay nada que os guste de la reforma laboral? ¿ni siquiera la capacidad para crear más de 2.200 empleos al día? Ahora bien, ¿tenemos cosas que mejorar después de cinco años de la norma en vigor? Pues seguramente sí, porque todo en esta vida se puede mejorar", ha dicho Báñez en declaraciones a la COPE.

La ministra se verá las caras con los dirigentes sindicales en una reunión convocada el jueves para analizar las posibles medidas para mejorar las cuentas de la Seguridad Social.