CCOO y UGT han anunciado que inician un proceso de movilización que culminará el próximo 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer.

La movilización propuesta por los sindicatos de Unai Sordo y Pepe Álvarez tendrá tres frentes (negociación colectiva, diálogo social e igualdad) y empezará con asambleas en los centros de trabajo, que culminarán el próximo 8 de febrero en un gran acto sindical unitario. El colofón será el 8 de marzo, para el que se convoca "dos horas de paro por turno, contemplando la posibilidad de que algunos sectores puedan hacerla de 24 horas".

Diálogo con el Gobierno

El pasado 26 de julio del 2018, el Ejecutivo socialista anunció el inicio del diálogo social con la creación de cinco mesas en las que se abordarían la igualdad, el empleo y las relaciones laborales, la formación, la Seguridad Social y la lucha contra la economía sumergida, además de la creación de un grupo de trabajo para redactar un nuevo Estatuto de los Trabajadores.

En éstas se ha debatido sobre la revalorización de las pensiones, la subida de cotizaciones para los autónomos a cambio de mayor protección social y la derogación de los aspectos fundamentales de la reforma laboral del 2012, pero queda trabajo por hacer.

Precisamente en materia de pensiones, el Gobierno quiere que en el marco del diálogo social y de acuerdo con las recomendaciones de la comisión del Pacto de Toledo, se diseñe en los primeros seis meses del año un mecanismo de revalorización de las pensiones que garantice el mantenimiento de su poder adquisitivo, preservando la sostenibilidad social y financiera del sistema de Seguridad Social.

Reforma laboral

Además, la derogación de los aspectos fundamentales de la reforma laboral, prioridad para los sindicatos, todavía no está cerrada y UGT ya ha advertido con movilizaciones si no se cambia esa regulación.

Esta reunión llega precedida de la subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a 900 euros mensuales y de la batería de medidas laborales que aprobó el Gobierno en el último Consejo de Ministros del 2018.

Entre dichas medidas destacan la subida de las pensiones del 1,6% este año, la posibilidad de "jubilación obligatoria" para quienes tienen derecho al 100% de la pensión, la derogación del contrato de apoyo a emprendedores y del complemento salarial, una subida de la base máxima de cotización del 7%, un incremento de la base mínima para autónomos del 1,25%, sanciones para quienes utilicen la figura del falso autónomo, penalización en la cotización para los contratos de más corta duración o la obligatoriedad de cotizar por los becarios.

En cuanto se aprobaron estas medidas, CCOO criticó que algunas todavía estaban debatiéndose o eran el "resultado parcial" de los trabajos que se estaban desarrollando en el diálogo social, mientras UGT abogó por "intensificar" las negociaciones para derogar la reforma laboral.