China ha comenzado a aplicar este lunes aranceles de entre el 15% y el 25% a una lista de 128 productos de EEUU como represalia a la imposición de tarifas al acero y el aluminio chinos anunciada por la Casa Blanca, según ha confirmado el Ministerio de Comercio de China. La medida supone un precedente que podría elevar las trabas al comercio internacional a escala mundial.

En concreto, las autoridades chinas han decidido suspender desde este lunes los acuerdos de reducción de gravámenes y pasarán a gravar con un arancel del 15% un total de 120 productos estadounidenses, incluyendo las frutas, mientras que aplicará un arancel del 25% a ocho productos, incluyendo el cerdo y productos relacionados.

Un portavoz del Ministerio de Comercio de China señaló que Pekín considera que la adopción por parte de EEUU de medidas contra las importaciones de acero y aluminio representa un abuso de la cláusula de excepción de la Organización Mundial del Comercio (OMC) al tener como objetivo únicamente una serie de países "violando gravemente el principio de no discriminación que es la piedra angular del sistema multilateral de comercio".

De este modo, el Ministerio chino indicó que el pasado 26 de marzo remitió una solicitud de compensaciones a EEUU a la que las autoridades estadounidenses no dieron respuesta, tras lo que el pasado 29 de marzo, China informó a la OMC sobre su decisión de suspender concesiones e imponer aranceles sobre determinados productos importados desde EEUU con el fin de equilibrar el efecto de las medidas aplicadas por EEUU sobre productos chinos.

"La suspensión de parte de sus obligaciones es el legítimo derecho de China como miembro de la OMC", indicó el Ministerio de Comercio de China, expresando su confianza en que EEUU "retirará las medidas que contravienen las normas de la OMC tan pronto como sea posible para que el comercio entre China y EEUU vuelva a la normalidad". "Como las dos mayores economías mundiales, la cooperación entre China y EEUU es la única opción correcta", indicó el Ministerio chino, subrayando que ambas partes deben resolver sus problemas mediante el diálogo y la negociación.