La Comisión Nacional de los Mercados y la Competencia (CNMC) no le quita ojo a Correos. El regulador abrió ayer un nuevo expediente sancionador contra la empresa pública por «incumplir los plazos que marca la normativa» para los envíos del paquete azul, es decir, para aquellos paquetes nacionales de hasta 20 kilogramos de peso.

El operador español de servicio postal y paquetería está sometido al cumplimiento de unos criterios mínimos de calidad en su labor de Servicio Postal Universal (SPU). Entre las obligaciones, la prestación en todo el territorio, la existencia de unos precios asequibles para los usuarios y el cumplimiento de unos plazos de entrega de cartas y paquetes estipulados por Ley.

Sin embargo, según la autoridad de competencia y regulación española, Correos habría incumplido este último aspecto entre los años 2014 y 2018. Un hecho que ha quedado «constatado» para la CNMC en sus informes anuales sobre el control y medición de los indicadores de calidad del Servicio Postal Universal y que fueron especialmente relevantes en el año 2018.

Hace dos años, según el regulador, solo el 47% de los paquetes se entregaron a sus destinatarios en el plazo de tres días laborables a partir de la fecha de envío (D+3), un objetivo muy alejado del 80% fijado por la normativa. En el caso del objetivo de entrega (D+5), solo el 73% de los paquetes cumplió ese plazo, frente al 95% que debería haberse alcanzado.

Por ello, la CNMC decidió incoar un expediente que en caso de resultar en sanción podría alcanzar los 400.000 euros al implicar la comisión de una infracción administrativa muy grave de la Ley del Servicio Postal Universal.

No es la primera vez que Competencia señala con el dedo directamente a Correos. El organismo que preside José María Marín Quemada tiene abierto un expediente contra la empresa pública por abuso de posición de dominio al realizar descuentos a grandes empresas.