Coca-Cola ha iniciado un proceso de reestructuración a nivel mundial que se cobrará las primeras 4.000 bajas en Norte América. La multinacional ha anunciado este viernes un paquete de salidas voluntarias para recortar cerca del 37% de los 10.600 empleados que tiene actualmente en Estados Unidos, Canadá y Puerto Rico; según recoge el medio estadounidense USA Today. La multinacional persigue capear así las pérdidas sobrevenidas desde el inicio de la pandemia y comienza por Norte América un proceso de recortes de plantilla que afectará a todos sus mercados. Sobre la dimensión del mismo, no obstante, la firma no ha adelantado más detalles.

La compañía ha hecho pública su intención de priorizar las bajas voluntarias mediante un paquete de incentivos, aunque también ha manifestado que no descarta los despidos para alcanzar el cupo de bajas calculado. El recorte de plantilla de la firma llega tras los malos resultados registrados durante el segundo trimestre. El grupo vio desplomarse sus ventas en el momento más crítico de las medidas de contención impuestas ante la pandemia en los países afectados por los despidos. La facturación se desplomó un 28% en el segundo trimestre y los beneficios cayeron el 32% en dicho periodo.

El plan de recortes se extenderá a otros países y para acometerlo la dirección de Coca-Cola prevé desembolsar entre 295 millones de euros y 460 millones; según ha informado la CNBC. La multinacional cuenta con una embotelladora en la provincia de Málaga y emplea a 4.300 personas en España. Hasta la fecha se desconoce si el plan de reestructuración anunciado tendrá algún efecto sobre dicha planta y sus trabajadores.