La compañía automovilística china BYD está negociando con Daimler, la matriz de Mercedes-Benz, para proveer a la firma alemana de chips que permiten aumentar la autonomía de vehículos eléctricos. Según las primeras informaciones, publicadas por la agencia Europa Press, la marca asiática produce de forma independiente este componente.

Este chip es un dispositivo semiconductor utilizado por la misma BYD en sus coches que sirve como un interruptor eléctrico que minimiza la pérdida de energía de la batería para incrementar su alcance y además mejorar la fiabilidad de los coches eléctricos.

Las negociaciones, siempre según Europa Press, se encontrarían actualmente en una etapa avanzada, pero ninguna de las dos compañías confirman que se vaya a materializar. Estas negociaciones se enmarcan dentro de la estrategia de BYD de ofrecer componentes y tecnología a otros fabricantes para diversificar su modelo de negocio.

LA MOVILIDAD COMPARTIDA, OTRA APUESTA DE BYD

Estas negociaciones se filtran apenas unas horas después de que la agencia Reuters desvelara el acuerdo de BYD con Didi Chuxing, gigante chino del sector de los coches con conductor, para producir un vehículo eléctrico específico para la compañía. Según dicha información, ambas empresas ya habrían desarrollado prototipos con los que se estarían realizando pruebas.

No está confirmado cuántas unidades producirá BYD, que vendió 451.000 coches el año pasado, específicamente para Didi Chuxing pero la compañía abre así otro modelo de negocio, el de la personalización de productos para otras compañías. Didi domina el mercado de los coches con conductor en China por encima de Uber, un sector que se responsabiliza de haber matriculado un tercio de todos los eléctricos que circulan en el Gigante Asiático, más de 969.000 unidades. Didi espera desplegar una primera oleada de vehículos eléctricos por todo el país a finales de 2020.