Los supermercados Dia elevaron sus pérdidas hasta los 418 millones de euros en el primer trimestre, un 88,3% más que un año antes, en un periodo marcado por un contexto «empresarial, financiero y corporativo altamente volátil y complicado» que incluyen el anuncio de un patrimonio neto negativo y la amenaza de disolución a corto plazo, el deterioro de los ingresos y una caída de las ventas, la incertidumbre sobre la situación de la compañía, una opa y una negociación con los prestamistas.

El grupo, que ahora comanda el magnate ruso Mijaíl Fridman, achaca las pérdidas a la situación antes descrita y a la caída de las ventas. Así, entre enero y junio, Dia registró un retroceso del 7% de sus ingresos, hasta los 3.400 millones de euros. Por su parte, las ventas comparables retrocedieron un 7,8%, en comparación con el -3,6% del mismo periodo del 2018, mientras que el resultado bruto de explotación (Ebitda) ajustado se situó en 33,2 millones de euros, un 83,9% menos.

No obstante, la compañía añade que en los meses de julio y agosto se empieza a revertir la situación con «una recuperación gradual y significativa desde los mínimos históricos registrados». Con la llegada nueva dirección -el magnate ruso Mijaíl Fridman se hizo con el 69,76% de la cadena en mayo-, el acuerdo de refinanciación con los bancos -que le permitió pagar los 300 millones de euros en bonos que vencían ese mes- y la inyección de liquidez -Fridman aportó 490 millones de euros para sacar a la empresa de la situación de patrimonio neto negativo-, Dia recuperó oxígeno al salvarse del concurso de acreedores y dio un impulso al negocio.

ERE EN EL ÁRBOL / Por otra parte, Dia anuncia la puesta en marcha un proceso de despido colectivo en la sociedad filial Grupo El Árbol, vinculado principalmente al cese previsto de la actividad de las tiendas Max Descuento y que podría afectar a un máximo de 210 personas.