Boeing ha anunciado este lunes la dimisión de su hasta ahora consejero delegado (CEO), Dennis Muilenburg, que será sustituido en el cargo a partir del 13 de enero por el actual presidente, David L. Calhoun, que continuará como miembro del consejo, en medio de la crisis que padece el gigante aeronáutico.

Según ha informado la compañía en un comunicado antes de la apertura de Wall Street, Muilenburg "renunció a sus cargos" de consejero delegado y director del consejo "con efecto inmediato", por lo que el director financiero de Boeing, Greg Smith, ocupoará este puerto de forma interina hasta que Calhoun renuncie a sus compromisos no relacionados con Boeing.

Los cambios en la cúpula del fabricante aeronáutico se producen mientras la compañía lucha por recuperar la confianza de los reguladores, los clientes y el público tras los dos accidentes mortales de su avión más vendido, el 737 Max, un modelo que no cuenta aún con el permiso de los reguladores para prestar servicio.

Al abrir la Bolsa de Nueva York, los inversores acogieron bien la reestructuración de Boeing, que lideraba las ganancias del Dow Jones con un ascenso de cerca del 3,5 % a los 30 minutos de la apertura de la sesión.

En definitiva, la junta directiva de Boeing ha nombrado al actual presidente de la compañía, David L. Calhoun, como CEO y presidente a la vez, lo que tendrá efecto a partir del 13 de enero del próximo año.

Calhoun seguirá siendo miembro de la junta, mientras que Lawrence W. Kellne, también miembro de la junta pasará a ser presidente no ejecutivo con efecto inmediato.

El director financiero de Boeing, Greg Smith, tendrá las atribuciones de CEO interino durante el breve período de transición, mientras que Calhoun renuncia a sus compromisos no relacionados con Boeing.

"El consejo de administración decidió que era necesario un cambio de liderazgo para restaurar la confianza en el avance de la compañía a medida que trabaja para reparar las relaciones con los reguladores, los clientes y todas las demás partes interesadas", aseveró Boeing en su comunicado.

Bajo los cambios en su equipo deirectivo, "Boeing operará con un compromiso renovado de total transparencia, incluida una comunicación efectiva y proactiva con la Administración Federal de Aviación (FAA por sus siglas en inglés), otros reguladores globales y sus clientes".

Calhoun afirmó en la nota de Boeing: "Creo firmemente en el futuro de Boeing y el 737 Max. Me siento honrado de liderar esta gran compañía y a los 150.000 empleados dedicados que están trabajando arduamente para crear el futuro de la aviación".