La Guardia Civil ha detenido en Sant Cugat del Vallès a dos hombres acusados de estafar en total un millón de euros a inversores a los que hacían creer que obtendrían grandes beneficios en el mercado de divisas Forex. Según informa la Guardia Civil, las investigaciones que han terminado con la detención de estas dos personas, de 52 y 59 años y originarios de Argentina y Alemania, pero con nacionalidad española, se iniciaron en diciembre del año pasado en el marco de la operación Watermark.

Los detenidos están acusados de los delitos de apropiación indebida, estafa y administración desleal, mientras que en esta operación los agentes también han intervenido vehículos de alta gama, dinero en metálico y otros bienes de lujo. Las investigaciones se iniciaron por una querella presentada contra los administradores de dos sociedades inversoras, una de ellas 'off-shore' constituida y domiciliada en Belice y la otra, española.

PROMESAS

A lo largo de la investigación, se determinó que los responsables de estas empresas habían captado a varios inversores mediante la promesa de "suculentos" beneficios (un 45% - 50% anual y riesgo mínimo), convenciéndoles de que existía un algoritmo "infalible". Estas empresas afirmaban que con el algoritmo, denominado Robot y que habían desarrollado ellas mismas, se podían llevar a cabo miles de operaciones de inversión en el mercado de divisas Forex, garantizando que el 70% del capital invertido quedaría en depósito y a salvo.

HURTOS CONSECUTIVOS

Tras el proceso de captación de las víctimas, éstas debían abrir una cuenta en una entidad de crédito de Suiza y transferir un capital mínimo de 10.000 dólares para empezar a operar, autorizando a los detenidos poder hacer uso de sus cuentas y hacer operaciones de inversión a su nombre. Tras varios meses, los estafados comprobaban que no habían obtenido beneficio alguno y que sus cuentas se habían quedado sin saldo o en números rojos, hechos que los estafadores atribuían al ataque de piratas informáticos a la entidad bancaria suiza o a las crisis de Grecia. Asimismo, los detenidos habían llegado a convencer a algún inversor que volviera a ampliar los saldos hasta 75.000 dólares por persona para recuperar las pérdidas, cosa que no pasaba y, además, volvían a perder el dinero invertido.

REGISTROS

En total, se calcula que las víctimas habrían perdido cerca de un millón de euros, habiendo quedado algunas de ellas en una situación económica muy precaria tras invertir todos sus ahorros en este negocio fraudulento. La operación se llevó a cabo por orden del Juzgado de Instrucción nº 19 de Barcelona, y la Guardia Civil llevó a cabo tres registros en domicilios particulares y en las sedes sociales de las empresas, donde se intervino documentación y material relacionado con la actividad delictiva.