El Gobierno ha iniciado los trámites para ratificar el convenio 190 de la Organización Internacional del Trabajo (OIT), con el objetivo de reforzar los protocolos contra la violencia y el acoso en el trabajo. Así lo anunció ayer la ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, durante la visita del presidente de la OIT, Guy Ryder. La voluntad del Ejecutivo es aumentar los supuestos en los que una persona pueda alegar que ha sido víctima de una discriminación o violencia en el centro de trabajo, especialmente por razones de género u orientación sexual.
Desde el ministerio se han activado los trámites para ratificar el 190 de la OIT, que se llevarán a cabo en coordinación con otros departamentos, como el de Justicia o el de Asuntos Exteriores. La voluntad del Ejecutivo es modificar, entre otros, el ordenamiento jurídico para dotar de mayor protección a las víctimas de acoso, incorporando comunicaciones por teléfono, redes sociales u otros formatos digitales. Fuentes de Trabajo detallaron que también se incorporarán nuevos supuestos, como la relación entre becarios.
El Gobierno ha iniciado esta vía para sumarse así a Uruguay como los dos primeros países que ratifiquen el convenio 190 de la OIT.
