Las nucleares seguirán siendo imprescindibles durante 50 o 60 años. Es lo que ha asegurado el consejero delegado de Endesa, José Bogas, este lunes durante la junta de accionistas de la compañía. En su opinión, la lógica transición hacia energías limpias requiere prudencia para evitar situaciones de riesgo de suministro energético. El directivo considera que para cumplir con los denominados Acuerdos de París de protección medioambiental del planeta es "imprescindible la extensión de la operación de las centrales nucleares hasta los 50 o 60 años", al igual que han hecho diversos países del entorno de España.

Bogas, reelegido como consejero delegado de Endesa por un periodo de cuatro años, ha indicado que la descarbonización de la economía requiere la sustitución progresiva de las centrales térmicas por instalaciones de energías renovables. En cualquier caso, ha señalado que para evitar situaciones de falta de suministro, presiones sobre los precios y efectos no deseados sobre las zonas afectadas, este proceso de sustitución ha de realizarse de manera ordenada.

Seguridad del suministro

Ante el panorama futuro de cambio de fuentes de energía, Endesa se plantea esquemas que permitan la extensión de la vida útil de las nucleares, ya que suponen "un pilar fundamental para garantizar la seguridad de suministro eléctrico a medio plazo", ha dicho Bogas. Para las compañías eléctricas como Endesa sigue siendo una prioridad estratégica diversificar su actividad y aprovechar continuamente oportunidades de inversión que permitan aumentar el parque renovable, que ya ha superado los 1.700 megavatios (MW) en el caso de esta compañía. Esta apuesta seguirá aumentando en el corto plazo, según Bogas.

En opinión del consejero delegado, el reciente informe sobre transición energética presentado por la Comisión de Expertos del Gobierno debe constituir "un importante punto de referencia". La compañía está de acuerdo en que es imprescindible "compartir entre todos los sectores" los costes de la política energética, unos coste que, en estos momentos, "recaen mayoritariamente en el sector eléctrico, a pesar de que solo representa el 19% de las emisiones totales de CO2; y en los clientes eléctricos, cuyo consumo energético solo supone el 26% del total del país". "La meta es conseguir un futuro sostenible. Y, para ello, lo primero que hemos de hacer sostenible es la propia transición energética. Creo que es posible la implantación progresiva de las medidas adecuadas para hacerla realidad a través de un calendario razonable, conocido y sostenible", dijo Bogas.

Presencia de Enel

El balance de la actividad presentado por Endesa ha sido globalmente positivo, gracias especialmente a la solidez que aporta formar parte del grupo Enel, que tiene un 70% de Endesa y con el que comparten "estrategia, recursos y determinación para competir en el mercado globalizado de la energía".

Pese al mensaje optimista del consejero delegado ante los accionistas, las tensiones laborales también existen en el grupo. Algo más de 300 trabajadores y delegados sindicales se han manifestado ante su sede para protestar, como ya hicieron el mes pasado ante la Embajada de Italia, por el vaciamiento que consideran que está haciendo el grupo italiano de Endesa, unas protestas que se producen en medio de la negociación del nuevo convenio marco de Endesa.

Situación en Catalunya

Por otra parte, en la intervención ante la junta de accionistas, el presidente de Endesa, Borja Prado, ha requerido a las fuerzas políticas "sabiduría, determinación y habilidad" para lograr "consensos" con el fin de ser capaces de encontrar una solución al conflicto en Catalunya.

En su discurso, Prado señaló que el horizonte político del país continúa "afectado por la compleja situación" en Catalunya, que supone "una amenaza y una brecha en la convivencia".

Resultados de la compañía

Prado valoró los "excelentes" resultados logrados por la compañía en el 2017, con un beneficio neto de 1.463 millones de euros, el 3,7% más, que refuerzan la política de dividendos de Endesa, "que establece el reparto del 100% del beneficio ordinario neto en los ejercicios 2017 a 2020. Así, la propuesta de dividendo para el 2018 del grupo asciende a 1,38 euros por acción, el 4% más que el repartido con cargo al ejercicio 2016.