El ministerio de Industria, Comercio y Turismo estudia liderar un proyecto europeo de hidrógeno. Igual que Francia y Alemania capitanean sendos proyectos de baterías eléctricas en el marco de la Alianza Europea de las Baterías, el Gobierno español quiere hacer lo propio con otra tecnología, el hidrógeno.

Así se lo hicieron saber el secretario de Estado de Industria y PYME, Raül Blanco, y el director general, Galo Gutiérrez a los representantes de las comunidades autónomas en el marco de la Comisión Sectorial de Industria y PYME que se celebró este lunes. En la reunión, el Ejecutivo anunció que está estudiando liderar un IPCEI acrónimo de 'Important Projects of Common European Interest' o proyectos que involucran a más de un estado miembro y que suponen una amplia ambición de I+D+I de hidrógeno en el seno de la Unión Europea.

Tanto Blanco como Gutiérrez confirmaron el compromiso del Gobierno por "el desarrollo de las baterías" con su participación en el proyecto alemán a través de las empresas Ferroglobe, Endesa Generación, Ampere y Little Electric Cars. Y también a través de EV100, asociación que integra a más de un centenar de empresas chinas, con la que España trata de desarrollar proyectos de "colaboración". Pero, al mismo tiempo, subrayaron la necesidad de orientar los recursos a "otras soluciones innovadoras y otras energías alternativas, como el hidrógeno", como vectores de almacenamiento y de movilidad.

El hidrógeno es una tecnología poco desarrollada, pero que suena cada vez con más fuerza, sobre todo, en el sector de la automoción como sustituto de la gasolina y el gasóleo, pero también del gas y la electricidad. Entre las ventajas del hidrógeno destaca su rapidez de recarga (tan solo unos minutos), entre sus inconvenientes, la falta de infraestructura.

El presidente y consejero delegado de Iveco en España, Jaime Revilla, reivindicó la semana pasada esta tecnología en el foro 'Electromovilidad y cambio climático' que podría suponer, a su juicio, una oportunidad para España. "La electrolisis podría convertir a España de importador de petróleo a exportador de hidrógeno", aseguró Revilla.

La electrolisis (proceso de ruptura de la molécula de agua con energía eléctrica) es una de las formas de producir hidrógeno que genera como único residuo el oxígeno y, por tanto, se trataría de un proceso completamente limpio si se utiliza electricidad renovable. Además, el hidrógeno es un gas combustible (arde), pero solo produce vapor de agua cuando se quema.