La amenaza de aranceles del Gobierno de Estados Unidos a la Unión Europea por valor de 7.500 millones de dólares, en respuesta a los subsidios europeos a Airbus, ha abierto un nuevo frente que amenaza al sector agroalimentario español. De momento, no hay cifras sobre el montante de ayudas que España podría solicitar a Bruselas pero el ministro de agricultura, Luis Planas, ya ha avanzado ante la Comisión Europea que si la Administración de Donald Trump pasa a la acción necesitarán apoyo financiero para compensar a sectores como el aceite, la aceituna de mesa o el vino.

No podemos anunciar ninguna cantidad sin efectuar una valoración previa del impacto y de la situación pero estamos hablando en el conjunto de los sectores afectados de exportaciones en el año 2018 de 764,7 millones de euros y de aranceles que podrían alcanzar los 191,5 millones de euros anuales, ha explicado Planas tras reunirse este miércoles con los comisarios de agricultura, Phil Hogan, y de comercio, Cecilia Malmström. A ambos responsables europeos les ha puesto al corriente de las dificultades que atraviesan o podrían atravesar algunos de los sectores agroalimentarios españoles.

Este es el caso del aceite de oliva que atraviesa según ha explicado Planas, una situación de precios complicada debido a una cosecha récord de 1,78 millones de toneladas en la campaña 2008-2019 que ha hundido los precios. Para paliar las consecuencias de los productores, el ministro ha pedido que active ayudas al almacenamiento privado cuanto antes aunque no se hayan alcanzado los umbrales mínimos.

El Gobierno también ha pedido ayuda para la promoción de la aceituna de mesa española, que ya sufrió un mazazo con la aplicación de medidas antidumping de Estados Unidos que le han hecho perder un 40% de cuota de mercado, y la posibilidad de examinar también apoyo para el almacenaje. La lista de Planas se completa con ayudas al vino, el porcino, los cítricos y el queso.

BRUSELAS EVALÚA EL POTENCIAL IMPACTO

Además de plantear la problemática de sectores concretos, Planas ha pedido a Malmström, en nombre del Gobierno de España, que mantenga hasta el ultimo momento la firmeza para evitar la aplicación de estas sanciones injustas para el conjunto del sector agroalimentario español. Pese a la falta de compromisos concretos por parte del Ejecutivo comunitario, el representante del Gobierno español se ha marchado de Bruselas satisfecho. Saco una conclusión positiva de esta visita. La Comisión Europea ha sido receptiva y sensible a la posición de España y espero que todo esto se concrete si por desgracia en las próximas semanas tenemos la decisión de la imposición de aranceles, ha valorado Planas que confía en que Bruselas conseguirá evitar una nueva guerra comercial en el ámbito agroalimentario.

Ese es el objetivo también de la Comisión Europea que ha reconocido el impacto negativo que tendrá la imposición de aranceles adicionales sobre las exportaciones europeas. Evitar ese escenario sigue siendo nuestra prioridad, ha indicado la Comisión Europea en un comunicado tras la reunión entre los comisarios y Planas. Bruselas, sin embargo, no ha confirmado si habrá o no ayudas. La Comisión está actualmente evaluando el potencial impacto potencial de las contramedidas anunciadas por Estados Unidos sobre los productos afectados, particularmente en el sector agrícola, ha indicado el portavoz de la Comisión, Daniel Rosario, que ha anunciado que a petición de varios ministros el Consejo de agricultura del próximo 14 de octubre examinará la situación.