Buscar piso en plena burbuja inmobiliaria puede resultar un infierno, pero si a ello añadimos la posibilidad de caer en una de las numerosas estafas presentes en las páginas de referencia podemos estar ante una película de terror. Adelantar dinero, no poder ver el piso o convertirse en embajador de esa vivienda son algunas de las claves de un negocio que encuentra cada vez más víctimas a través de Internet. Y es difícil de perseguir.

Precisamente por esto, las asociaciones de consumidores y fuerzas de seguridad emplean tiempo en hacer listas de recomendaciones y cuestiones a evitar a la hora de buscar un nuevo techo bajo el que vivir.

¿QUÉ TIPOS DE ESTAFAS SON HABITUALES?

  1. El ausente. Te dicen que no pueden enseñarte la vivienda. Es el fraude más extendido en la Red. Las páginas de alquiler de vivienda están repletos de anuncios en los que el supuesto propietario vive lejos, en otra ciudad o incluso en otro país, y por tanto no puede mostrarte la vivienda en la que tienes interés. Las fotos son llamativas, el precio asequible y las prisas por la competencia hacen que estés deseando verte en él. Se trata de un piso casi de ensueño, con el que es fácil caer. En la mayoría de los casos contactan contigo por mail, fuera de la plataforma donde has dado con él, y te aseguran que debes adelantar una parte del pago y que no podrás ver la vivienda antes.
  2. El embajador. Son personas que viven lejos de la vivienda que alquilan y que buscan en la ciudad a alguien que pueda cuidar de la casa y mostrarla a posibles interesados a través de un beneficio económico. Te quiere mandar las llaves por correo, pero para ver que tienes un gran interés te pedirá adelantar dinero a través de western Union, Money Gram o similares.

CÓMO EVITAMOS CAER EN EL ENGAÑO

A estas alturas te estarás preguntando cómo identificar una de esas estafas, o cualquier otra que pueda surgir en Internet. El miedo no puede paralizarte ante una gestión que hoy en día se realiza prácticamente siempre online, así que estas son algunas de las pautas a seguir:

  • Presta atención al lenguaje con el que se comunican. ¿Suena forzado o poco natural?
  • Probablemente estén utilizando el propio traductor de Google, algo que te daría una pista importante.
  • No hagas las gestiones fuera de las plataformas habituales como Idealista, Fotocasa o similares. Normalmente se ponen en contacto contigo a través de otras vías, como un e-mail, evitando estar bajo el dominio del anuncio original.
  • Phishing o suplantación de identidad. Revisa el correo desde el que recibes información, porque probablemente esté tratando de dar apariencia de oficial y riguroso, pero tenga algún elemento que llame la atención.
  • No pagues más de un mes de fianza. Es lo establecido por la ley. No hay límites en el depósito, pero desconfía si te piden cantidades exageradas o adelantar dinero sin haber cerrado todo legalmente.
  • Los estafadores suelen ofrecer beneficios a la víctima a cambio de hacer un pago al margen de la plataforma en la que se ha situado la vivienda. Es importante no seguir esa vía que te proponen, por muy suculento que parezca.
  • Compara precios y condiciones en distintas páginas.
  • Comprueba la veracidad del anuncio a través de las puntuaciones, los comentarios de los usuarios o las preguntas al propietario. Si no te da información exacta, debes desconfiar.
  • Deja rastro del pago a través de Paypal, transferencia o tarjeta. En este último caso, es importante comprobar que el titular de la cuenta coincide con el nombre de la persona que alquila.
  • Adelanta la mínima cantidad exigida y paga el resto una vez compruebes que todo es correcto.
  • Solicita una copia de todos los movimientos, como en el caso del pago de una fianza.
  • Comprueba la veracidad de las fotos comparando con otras páginas web, revisando la marca de agua y si provienen de otra página que no es la que estamos visitando. Puedes utilizar el buscador de Google. En imágenes, carga el archivo y encontrarás en qué webs se encuentran las mismas.

La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha alertado de esto en diferentes ocasiones, incidiendo en la importancia de seguir estas pautas que en general se resumen en tres partes:

  1. Si te dicen que tienes que pagar una cantidad antes de ver el piso, desconfía.
  2. Si te aseguran que viven fuera de la ciudad y no pueden enseñarte el inmueble, desconfía.
  3. Si el precio del alquiler te parece bajo respecto al entorno y aún así parece el piso de tus sueños, desconfía.

CÓMO ACTÚO SI SOY VÍCTIMA

Lo primero que hay que hacer es denunciar cualquier cosa extraña a la Policía o a la Guardia Civil. No solo para recuperar el dinero, sino para conseguir cerrar una página y evitar que más personas sufran el mismo engaño.