Un grupo inversor encabezado por la sociedad Kirkbi, propiedad de la familia Kristiansen fundadora de Lego, y en el que también participan Blackstone y el fondo de pensiones canadiense CPPIB ha acordado la adquisición del grupo Merlin Entertainments, sociedad gestora de los parques temáticos Legoland en todo el mundo.

La sociedad de inversión de la familia fundadora de Lego ha mantenido una participación estratégica significativa en Merlin Entertainments, del 30%, desde la venta de Legoland Parks a la sociedad en 2005.

El acuerdo para comprar Merlin Entertainments valora en 455 peniques cada acción, lo que supone valorar la sociedad en cerca de 4.800 millones de libras (casi 5.350 millones de euros). La oferta supone una prima del 15,2% sobre la cotización de la sociedad, que cerró en la Bolsa de Londres a 395 peniques.

En virtud del acuerdo, Kirkbi será propietaria del 50% de Merlin Entertainments, mientras que Blackstone y el fondo de pensiones canadiense CPPIB serán los dueños del resto. Se espera que la operación, cuya contraprestación se realizará combinando financiación y deuda, se cierre en el cuarto trimestre de 2019.

Merlin Entertainments, que también opera el parque temático Alton Towers, la noria London Eye o el museo de cera Madame Tussaud's, cotiza en Bolsa desde el año 2013.

El grupo inversor reconoce que la sociedad gestora de los parques Legoland requiere una inversión significativa a largo plazo para garantizar los activos existentes e impulsar el crecimiento continuo de Merlin Entertainments. "Creemos que este grupo de inversores tiene los recursos necesarios para su próxima fase de crecimiento", ha dicho el director ejecutivo de Kirkbi, Soren Thorup Sorensen.

La operación, uno de los mayores acuerdos de capital privado en Europa en los últimos años, permitirá a Merlin Entertainments satisfacer las demandas de los accionistas y cumplir con los planes de crecimiento. En abril, el fondo ValueAct pidió formalmente un cambio en la sociedad.

El consejo de Merlin Entertainments, asesorado por Goldman Sachs, Barclays y Citi, ha manifestado su intención de recomendar de forma unánime a los accionistas de la sociedad que acudan a la oferta, sujeta a la aprobación de la junta, por considerar que los términos de la misma son "justos y razonables" en base al informe encargado.